El concepto de infestación procede del vocablo latino infestatio. Una palabra esa que, a su vez, emana del verbo latín “infestare”, que puede traducirse como “corromper”, “infestar”, “asolar” o “alterar”.
El término alude al acto y el resultado de infestarse o de infestar.
Este verbo (infestar), por su parte, suele emplearse respecto a la invasión de un ser vivo por parte de un organismo patógeno. Infestar también puede referirse a provocar perjuicios o a llenar un lugar.
Por ejemplo: “Gracias a la campaña impulsada por el gobierno local, el índice de infestación del mosquito que provoca el dengue se ha reducido de manera considerable”, “La descomposición de la carne causó una infestación de larvas”, “No se han registrado casos de infestación de seres humanos por este artrópodo”.
Contagio, propagación o inoculación son algunas de las palabras que funcionan como sinónimos del término que ahora nos ocupa.
Una infestación se produce cuando un agente parásito invade un organismo. Los parásitos, como los ácaros, los piojos y las tiñas, acceden a un ser vivo para sobrevivir.
¿Qué diferencias hay entre una infestación y una infección? En principio hay que decir que, de acuerdo a la Real Academia Española (RAE), infectar es lo que hace un microorganismo patógeno cuando invade un organismo para multiplicarse.
Infestación e infección, por lo tanto, son ideas similares. En los dos casos hay un ser vivo que invade otro, provocándole un daño a través del desarrollo de un proceso patológico. La especificidad de cada noción por lo general se asocia al tamaño del invasor: la infestación es realizada por organismos macroscópicos, mientras que la infección se concreta por organismos microscópicos.
En el ámbito sanitario también se emplea la palabra que en estos momentos estamos abordando. Así, se habla, por ejemplo, de pediculosis o infectación por piojos. Esta situación la pueden tener personas que contarán como principales síntomas el picor del cuero cabelludo. El tratamiento consistirá en la eliminación de liendres mediante la llamada lendrera y también en el empleo de un producto farmacológico que se aplica sobre el cabello.
Asimismo, cuando en un hogar hay alguien que tiene ese tipo de infestación se hace necesario extremar las medidas de higiene, lavar toda la ropa e incluso la de cama a una altura mínima de 50º C, eliminar los posible piojos que pueda haber en los peines y cepillos introduciéndolos en agua caliente durante unos quince minutos e incluso aspirando a fondo la vivienda y especialmente los elementos textiles, como pueden ser las alfombras, los cojines o las mantitas que se usan en el sofá.
Para la parapsicología, una infestación consiste en la irrupción de fenómenos paranormales en un mismo sitio, sin que se detecte en ellos la intención de establecer una interacción o una comunicación.
De la misma manera, no podemos olvidar que el término que nos ocupa también se utiliza dentro del ámbito de los videojuegos. Así, por ejemplo, en el juego Days Gone una de las misiones que el jugador debe llevar a cabo lleva por nombre Infestación de Camp Sherman.
