La primatología es la disciplina que se dedica a desarrollar investigaciones sobre los primates. Un primate, en tanto, es un animal mamífero, plantígrado, con cinco dedos que finalizan en uñas en sus extremidades y con pulgares oponibles al resto en los miembros superiores.
Los primates
Antes de avanzar con la idea de primatología, es importante mencionar que el ser humano es un primate. Los monos, los lémures y otras clases de animales también forman parte de este conjunto, dividido a su vez en dos subórdenes: los haplorrinos (de nariz simple) y los estrepsirrinos (de nariz torcida).
Se trata de un orden de mamíferos placentarios: un orden es una categoría obligatoria para la clasificación de los seres vivos que se ubica entre las de clase y familia, aunque antiguamente era sinónimo de esta última; los mamíferos son animales vertebrados que tienen glándulas mamarias para alimentar a sus hijos con leche; los mamíferos placentarios son los que retienen a sus crías en la placenta durante su desarrollo, antes del parto.
Este orden surgió durante la última parte del Cretácico, a lo largo de treinta millones de años, como evolución de mamíferos terrestres de escaso tamaño. En sus comienzos, debieron adaptarse a vivir en los árboles de las selvas tropicales. Esto podemos apreciarlo en varios de los rasgos más evidentes de los primates: su visión aguda, capaz de percibir un gran número de colores, su cintura escapular (que va desde el extremo superior del músculo pectoral mayor a la base del cuello) y la destreza de sus manos.
Objetivos de la primatología
Retomando el concepto de primatología, su campo de estudio combina cuestiones propias de la biología, la ecología, la antropología y otras ciencias. Sus expertos examinan las características anatómicas de los primates, su etología y otros rasgos.
Es importante mencionar que el Homo sapiens y el chimpancé comparten el 98% del material genético. Esta similitud demuestra la importancia de la primatología para comprender la evolución de nuestra especie.
Jane Goodall
Una de las grandes especialistas históricas en primatología es la inglesa Jane Goodall. Integrante de la Orden del Imperio Británico y de la Legión Francesa y con varios doctorados honoris causa en su haber, esta científica estudió durante más de cinco décadas los vínculos sociales de los chimpancés en un parque nacional de Tanzania, realizando grandes descubrimientos. Goodall también se destaca por su esfuerzo para garantizar el bienestar animal.
Su profesión es la etología, una rama de la psicología experimental y de la biología que se centra en el estudio del comportamiento de los animales en sus hábitats naturales. Si bien son más comunes los estudios de campo, los etólogos también pueden optar por realizar sus investigaciones en un laboratorio, con la inevitable privación de libertad de los sujetos. Dada su inclinación animalista y activista, Goodall estaba absolutamente en contra de esta última opción.
Es la fundadora del instituto homónimo, así como del programa Raíces y Brotes, y su trabajo en favor del bienestar y la conservación de los animales es realmente digna de ser admirado. Además, fue presidenta de la organización llamada Defensores de los Animales, la cual estuvo en contra del uso de animales en laboratorios para la medicina, de su explotación en las granjas o en los deportes y de la existencia de los zoológicos.
A nivel académico
Cabe destacar que diferentes centros educativos de todo el mundo dictan maestrías y doctorados en primatología. Los estudiantes, de este modo, acceden a clases teóricas y a prácticas profesionales para especializarse en la materia.
También podemos mencionar la antropología física (o antropología biológica), una rama de la biología y la antropología, así como de la propia primatología. Se encarga de estudiar la evolución y variabilidad biológica de nuestra especie, comenzando por el pasado más remoto y llegando a la actualidad. Su perspectiva evolutiva, biocultural y comparativa la distingue de otras disciplinas.