Querer es un verbo que proviene del latín quaerĕre y que significa “tratar de obtener”. El término tiene diversos usos y aplicaciones. Querer es, por ejemplo, tener cariño o amar a alguien o algo: “Hagas lo que hagas, siempre te voy a querer”, “No te haces una idea de lo mucho que quiero a mi perro”, “La primera vez que me dijo que me quería, cambió mi mundo”.
En una hipotética escala de afecto, querer es un sentimiento menos profundo que amar. Los miembros de parejas que recién se forman suelen decirse que se quieren, mientras que, con el tiempo y mientras avanza la confianza mutua, pasa a hablarse de amor.
Querer como desear o pretender
Este verbo también hace referencia a apetecer o desear algo: “Quiero comer milanesas con papas fritas”, “Pedro me dijo que quería terminar el trabajo para llegar temprano a su casa”, “No quiero ningún regalo para mi cumpleaños”.
Es importante establecer además que existe una expresión coloquial que hace uso del término querer. Nos estamos refiriendo a la locución adverbial “sin querer”. Con ella lo que se intenta expresar es que una acción determinada se ha realizado sin ningún de intención ni premeditación.
Un claro ejemplo del uso de la acepción de esa expresión que hemos expuesto sería el siguiente: “Pedro golpeó en la cara sin querer a Félix al realizar un giro con los brazos abiertos”.
Resolver, determinar, intentar o pretender algo y tener voluntad de ejecutar algo son otras acciones que se denominan con la palabra querer: “Yo quiero que esto sea así”, “Nunca quise que las cosas terminarán de esta forma”.
En el marco de un juego, querer es aceptar un envite: “Quiero vale cuatro” (una expresión del truco).
El concepto en el cine
Dentro del ámbito del cine tenemos que destacar la existencia de una película que lleva por títuto “Amar no es querer”. Se trata de un film mexicano que se estrenó en el año 2011 bajo la dirección de Guillermo Barba. Adriana Louvier y Tony Dalton son los que encabezan el reparto de actores de la producción que narra como un hombre sufre un accidente que le deja en coma. Esa situación es aprovechada por su esposa para trabajar como voluntaria en un centro con niños con cáncer donde conocerá a alguien muy especial.
El problema surgirá cuando su marido se recupere del coma, vuelva a la consciencia, y él no la recuerde. A pesar de eso, él volverá a enamorarse de ella como la primera vez. Una situación que hará que la protagonista tenga que decidir si volver a vivir la ilusión del amor con su marido o si iniciar una nueva etapa junto a una persona desconocida que ha entrado a formar parte de su corazón de manera reciente.
“Las cosas del querer”, por otra parte, es una película española que se estrenó en 1989 y que tuvo el protagonismo de Ángela Molina y Manuel Bandera. Seis años más tarde se estrenó su secuela (“Las cosas del querer 2”), que contó con las actuaciones de Anabel Alonso y Antonio Valero.