Definición de

Raciocinio

Razón

La razón es la base de la facultad conocida como raciocinio.

Lo primero que hay que conocer, antes de entrar de lleno en el establecimiento del significado del término raciocinio, es el origen etimológico del mismo. Y eso nos lleva hasta el latín, pues deriva de la palabra “ratiocinium” y “ratiocinari”. Un verbo este último que puede traducirse como “razonar”.

El raciocinio es un concepto que se vincula a la capacidad de raciocinar y a sus efectos. El verbo raciocinar, por su parte, consiste en la utilización de la razón para producir conocimientos y establecer un juicio.

Una facultad vinculada a la razón

Puede decirse, por lo tanto, que el raciocinio es una facultad derivada de la razón. Cuando una persona desarrolla un pensamiento o analiza un hecho o un discurso, lo que hace es apelar a la razón. A través de una compleja actividad cerebral, el individuo pone en marcha los diferentes mecanismos del raciocinio.

El raciocinio, de este modo, se vincula a la inteligencia: el individuo coteja diferentes juicios para formular uno nuevo, que deriva de los previos. Esto quiere decir que el raciocinio permite producir conocimientos a través de la inducción o de la deducción.

Pensamiento

El raciocinio suele asociarse a la inteligencia.

Características del raciocinio

Además de todo lo expuesto, tendríamos que subrayar la existencia de otra serie de interesantes datos acerca del raciocinio, tales como estos:

-Cuenta con una estructura lógica, que se compone de antecedente, consiguiente y consecuencia.

-El mismo requiere obligatoriamente la existencia de una ordenación lógica.

-Desde el punto de vista de que el que nos ocupa viene a ser una operación de tipo mental, nos encontramos con el hecho de que es real y determinado.

-Para muchos estudiosos de la materia, el raciocinio se caracteriza por ser el acto en el que la mente de una persona es capaz de pasar de lo conocido a lo desconocido. Para eso hace utilización de todo los conocimientos que puede tener.

-Asimismo, estos expertos indican que el citado raciocinio se sustenta en dos leyes o principios básicos: que un antecedente verdadero da lugar a un consiguiente verdadero y que un antecedente verdadero viene a ser un conocimiento que también lo es.

-La argumentación en el raciocinio es la expresión externa del mismo.

-Se considera que este elemento que nos ocupa es el tercer pensamiento, pues primero surge el estudio de la idea, luego el juicio y finalmente él.

Una de las cuestiones que permite el raciocinio es la comparación entre conceptos. Un individuo puede escuchar dos posturas diferentes sobre un mismo tema, compararlas y sacar una conclusión. Ese proceso será el que permita generar un nuevo conocimiento, diferente al anterior.

Diferencias entre los seres humanos y los animales

Es posible afirmar, por otro lado, que el raciocinio diferencia al ser humano del resto de las especies. Las personas razonan, mientras que los animales actúan por instinto y tienen estructuras de pensamiento menos desarrolladas.

Algunos especialistas afirman que ciertos animales también tienen raciocinio, ya que están en condiciones de elaborar planes, de apelar a la lógica y hasta de desarrollar pensamientos abstractos, aunque a nivel más simple que el ser humano.

Cómo citar este artículo Publicado por Julián Pérez Porto y María Merino. Actualizado el 17 de septiembre de 2021. Raciocinio - Qué es, características, definición y concepto. Disponible en https://definicion.de/raciocinio/
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