El sotobosque es el conjunto de arbustos, hierbas y matorrales que, en un bosque, se desarrollan debajo de los árboles. Puede decirse, en este sentido, que el sotobosque es el sector boscoso más cercano a la superficie y cubierto por el dosel forestal (las copas de los árboles).
Además de arbustos, hierbas y matorrales, en el sotobosque pueden encontrarse árboles jóvenes. Estos ejemplares, con los años, irán creciendo hasta dejar el sotobosque y pasar a ser parte del dosel forestal. El resto de las especies, en cambio, permanecen durante toda su vida en el sotobosque.
Características del sotobosque
La luz solar llega en cantidades limitadas al sotobosque, ya que los árboles más altos se encargan de bloquearla. Esto hace que las especies que forman parte del sotobosque deban optimizar su capacidad de fotosíntesis debido a que luz de la que disponen es reducida.
Otra particularidad del sotobosque, también relacionada con la altura del dosel forestal, es que el suelo se calienta de manera lenta y, de este modo, también se ralentiza la evaporación. Como consecuencia de esta característica, el sotobosque cuenta un índice de humedad más elevado que el resto del bosque; por eso suele albergar distintas clases de hongos.
Sus especies
La reducida iluminación solar y el alto nivel de humedad convierten al sotobosque en un hábitat especial para diversas especies de flora y fauna. Esto hace que, en un mismo bosque, podamos encontrar plantas y animales muy distintos según el sector en el que vivan.
Veamos a continuación algunas de las plantas que podemos encontrar en esta subestructura del bosque a la cual denominamos sotobosque, que ofrece una particular variedad de especies «refugiadas» bajo las copas de los árboles. Imponentes tamaños, un colorido sin igual e intensos sabores son algunos de sus principales rasgos.
Helechos arbóreos en el sotobosque
En un bosque donde abundan los castaños y los robles, por ejemplo, debajo de ellos es posible hallar diversos helechos arbóreos, los cuales colaboran en la creación de un paisaje verdaderamente majestuoso. Cabe mencionar que en una zona como ésta también puede haber un curso de agua que recorra parte de su superficie, rodeado de plantas silvestres en una pradera.
Volviendo a los helechos arbóreos, uno de ellos puede ser el denominado Dicksonia antarctica, una planta originaria de Australia que data del período Jurásico y puede llegar a medir varios metros de altura (incluso superar los 12 metros en la naturaleza). Su tronco se asemeja al de las palmeras. Como es de esperarse de una especie del sotobosque, no requiere exposición directa a la luz solar para su desarrollo.
Otra de las especies típicas de un sotobosque como el descrito más arriba es el Dryopteris filix-mas. Este helecho, a diferencia del anterior, no posee un tronco y su tamaño es menor, aunque sus frondes también son de una gran belleza.
El Phiatea cooperi, por su parte, es un helecho estructural que suele crecer en las zonas tropicales, aunque también se ha adaptado muy bien al Atlántico. Al igual que en el caso del Dicksonia antarctica, sus frondes son muy atractivos y alcanzan un gran tamaño.
Flores y frutos
Pasando a la pradera, en el sotobosque pueden aparecer muchas flores silvestres de aspectos realmente variados e impactantes, como ocurre con la Meconopsis cámbrica o la Silene dioica. La primera de ellas destaca por su colorido, mientras que la segunda es especialmente delicada y prefiere la humedad y la sombra para su desarrollo.
Las fresas del bosque también pueden encontrar su sitio en un entorno de esta clase, y se caracterizan por la intensidad de su sabor y por su discretas dimensiones.
Otros usos del término sotobosque
Sotobosque, por último, es el nombre de una posada ubicada en la localidad española de Mortera y de un club de Soto del Real.
La posada en cuestión ofrece alojamiento de categoría 3 estrellas. En cuanto al club, podemos decirse que se trata de una entidad de orientación y montaña.