Suprasistema es un término que no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE). Es posible comprender a qué se refiere el concepto, de todos modos, si analizamos sus componentes.
Sistema formado por otros
El prefijo supra- alude a lo que está sobre otra cosa o resulta superior. Un sistema, en tanto, es un conjunto ordenado de elementos que se encuentran interrelacionados.
Se denomina suprasistema, en este marco, a aquel sistema que está formado por otros sistemas. Esto quiere decir que un suprasistema (también llamado supersistema) es un sistema mayor compuesto por sistemas menores, que a su vez pueden contener subsistemas.
Utilidad del suprasistema
Los suprasistemas favorecen la organización jerárquica de diversas estructuras que funcionan de manera coordinada con un objetivo en común. Es posible comprender el suprasistema como el ambiente donde actúan otros sistemas.
En la llamada teoría de los sistemas, en definitiva, el suprasistema es el elemento mayor. Luego vienen los sistemas y finalmente los subsistemas. Es importante mencionar que un sistema puede pertenecer a más de un suprasistema.
Ejemplos
Un ejemplo habitual de suprasistema es el cuerpo humano. En él podemos encontrar varios sistemas (el sistema digestivo, el sistema circulatorio, etc.), a su vez integrados por subsistemas (como los órganos). Todas estas unidades trabajan en conjunto para el mantenimiento del suprasistema en cuestión.
Otro ejemplo de suprasistema es una computadora (un ordenador). En este suprasistema se halla la placa madre, placa base o motherboard, que puede entenderse como un sistema formado por subsistemas como el microprocesador y la memoria de acceso aleatorio o memoria RAM.
Estos y otros numerosos suprasistemas, siendo nosotros mismos uno de ellos, forman parte de la vida cotidiana, porque no podemos concebir la vida sin una organización jerárquica de este tipo. Todo lo que somos y vemos se compone de diversas partes de variada importancia, que trabajan en conjunto aportando cada una diferentes beneficios para la consecución del objetivo común.
En la empresa
Uno de los ejemplos de organización más comunes de nuestra especie es la empresa. Puede cobrar un gran número de formas diferentes, según su especialidad y su país de origen, entre otros factores; sin embargo, algo que se da en todos los casos es que se trata de un suprasistema. Esto se puede comprobar sencillamente, ya que cumple todos los requisitos para llevar tal etiqueta.
En primer lugar, es un sistema complejo, formado por una cantidad variable de subsistemas, los cuales a su vez pueden tener otros más pequeños, y así sucesivamente. No puede haber una empresa cuyos subsistemas la desvíen de sus objetivos principales, sino que todos deben colaborar a alcanzarlos. Los diferentes departamentos, como ser el de marketing, el de desarrollo y el de asistencia técnica, son tres de los subsistemas más comunes dentro de una empresa.
Los continentes
Hablando de suprasistemas normales en nuestro día a día, no podemos olvidar uno de los fundamentales: el continente. Es que no sería fácil escapar de este tipo de organización geográfica para asentarse, ya que el mundo entero se encuentra dividido en continentes desde hace ya mucho tiempo, tanto como decenas de generaciones.
Dentro de este gran sistema hay otros más pequeños, que son los países, unidades más comunes para identificar la procedencia de una persona. Por lo general no decimos «nací en tal continente», sino que nos referimos a uno de sus subsistemas para aportar una mayor precisión a nuestro interlocutor.
Cabe mencionar que este suprasistema es uno de los más complejos, aunque no tanto como el planeta mismo, ya que se compone de muchos otros, pasando por regiones, provincias, condados, ciudades y llegando a los barrios, entre otras muchas posibilidades.