En el latín es donde podemos encontrar el origen etimológico del término emulsión que ahora nos ocupa. Exactamente es fruto de la suma de varios componentes léxicos de dicha lengua como son los siguientes:
-El prefijo «ex-«, que significa «hacia fuera».
-El verbo «mulsus», que puede traducirse como «ordeñar»
-El sufijo «-sion», que se usa para indicar «acción y efecto».
Partiendo de todo lo expuesto, podemos señalar que emulsión significa «mezcla de líquidos que son no solubles entre sí de forma natural».
En el ámbito de la química, se llama emulsión a la dispersión de un fluido en otro con el cual no puede mezclarse.
Para que se genere una emulsión, por lo tanto, se necesitan dos líquidos que no sean miscibles (mezclables). Al combinar ambas sustancias, una de ellas se dispersa en la otra, obteniéndose un resultado con una cierta homogeneidad. Un ejemplo típico de emulsión es la combinación de aceite y agua.
En el contexto de la cocina, de hecho, las emulsiones son bastantes frecuentes. La mayonesa, también conocida como mahonesa, es una emulsión que se forma batiendo aceite y huevo, añadiendo también otros ingredientes como jugo de limón y sal.
Otra emulsión popular es la salsa rosa o salsa cóctel, compuesta básicamente por mayonesa y kétchup (aunque se le puede agregar coñac, jugo de naranja u otros productos).
Las emulsiones pueden formarse de distinta manera. En algunos casos, las partículas de sus componentes se funden y dan lugar a una especie de capa. En otras situaciones, las partículas pueden concentrarse en un lugar específico de la mezcla (como el fondo o la superficie) o incluso desarrollar una masa.
En el ámbito de la fotografía, por otra parte, se denomina emulsión a una suspensión de bromuro de plata en gelatina que constituye la capa del material fotográfico que es sensible a la luz. Las emulsiones fotográficas implican que los cristales que tienen sensibilidad a la luminosidad se distribuyen a lo largo de la gelatina en cuestión.
Además de todo lo indicado, no podemos pasar por alto la existencia de lo que se conoce como emulsión epicutánea. Bajo este nombre se encuentra la mezcla de sudor, sebo y células muertas que vienen a recubrir lo que es la piel.
En concreto, existen dos tipos de emulsión epicutánea según el tipo de piel del que se trate. Así, en primer lugar, nos topamos con la llamada O/A, donde se establece que hay más agua que aceite, que es la que se da en pieles normales, secas, no grasas o deshidratadas, por ejemplo.
En segundo lugar, existe la llamada A/O, donde se indica que hay más aceite que agua. En concreto, aparece en lo que son pieles mixtas, grasas y de grasa ocluida.
Asimismo, existen las llamadas emulsiones asfálticas que son el resultado de mezclar agua y asfalto. Resultan ser inodoras, se echan a menos de 100º y hay que destacar que se pueden utilizar como coberturas impermeabilizantes.
