En el latín es donde se encuentra el origen etimológico de la palabra intensidad que es fruto de la suma o unión de tres partículas claramente diferenciadas: el prefijo –in que equivale a “hacia dentro”, el vocablo tensus que es sinónimo de “extendido” y finalmente el sufijo –dad que significa “cualidad”.
Intensidad es el nivel de fuerza con que se expresa una magnitud, una propiedad, un fenómeno, etc. Lo intenso, por lo tanto, suele hacer referencia a lo vehemente o impetuoso. Por ejemplo: “El ciclista mostró una gran intensidad en la última etapa y se hizo con la competición”, “La banda tiene una intensidad especial en vivo”, “Los amores hay que vivirlos con intensidad”.
Así, con respecto al aspecto sentimental o emocional es frecuente que se haga uso del término intensidad para referirse a esa fuerza que se tiene en determinados momentos en ese sentido. Un claro ejemplo puede ser el siguiente: “Juan Antonio vivió con tal intensidad su boda que no pudo evitar llorar al finalizar la ceremonia eclesiástica”.
Intensidad de la corriente e intensidad luminosa
La intensidad de la corriente es una magnitud que refleja el nivel de electricidad que logra atravesar un conductor en un determinado lapso temporal. Se trata de la circulación de una carga que, por acción de la movilidad de los electrones, atraviesa un cuerpo.
El amperímetro es la herramienta que permite cuantificar la intensidad de la corriente eléctrica. Este dispositivo es un galvanómetro que dispone de una resistencia en paralelo (denominada shunt) que le posibilita trabajar con distintos rangos de medición.
La intensidad luminosa, por otra parte, es la magnitud que revela el flujo de luz que emite una fuente en un sentido determinado por cada unidad de ángulo sólido (la candela).
El concepto en el sonido
Otro tipo de intensidad es la intensidad del sonido, una magnitud física que analiza las ondas sonoras para indicar su amplitud según la unidad conocida como fonio. Puede decirse que la intensidad del sonido es la potencia acústica que una onda transfiere por unidad de área a la orientación de propagación.
En el campo del sonido no debemos obviar tampoco lo que se conoce como intensidad musical. Un término este que se puede definir como aquella cualidad que hace diferenciar un sonido fuerte de otro suave y viceversa. En concreto se considera que esta es una de las cuatro características que tiene el sonido, entre las que están también el timbre, la duración y la altura.
En este sentido cobra especial importancia la psicoacústica que se caracteriza por ser la ciencia que se encarga de llevar a cabo el estudio de estas mencionadas cualidades.
Acento de intensidad e intensidad de cifrado
Asimismo tampoco podemos pasar por alto lo que se conoce como acento de intensidad. Una denominación con la que se suele definir a aquel tipo de acento que hace que una sílaba se distinga del resto gracias a que se pronuncia con una mayor y más contundente fuerza espiratoria.
Para la criptografía, por último, la intensidad de cifrado está vinculada a la cantidad de claves disponibles que pueden utilizarse en un cifrador. Esta cantidad o longitud suele expresarse en bits, ya que la criptografía actual generalmente apela a las claves binarias.