El lenguaje denotativo es claro y preciso.
Lenguaje es un término que proviene del vocablo occitano lenguatge. El concepto alude a la capacidad que tiene una persona para expresarse y establecer una comunicación con otros individuos mediante la articulación de sonidos o el uso de otro sistema de signos.
El adjetivo denotativo, en tanto, refiere a lo que denota. El verbo denotar, asimismo, hace mención a significar de manera objetiva o, en un sentido más amplio, a indicar.
Con estas ideas en claro, podemos avanzar con la definición de lenguaje denotativo. Así se denomina al lenguaje más preciso, que puede entenderse en cualquier contexto y funciona de la misma forma para todos los que hablan una determinada lengua.
TemasConcepto de lenguaje denotativo
Puede decirse que el lenguaje denotativo se usa en ámbitos formales, aunque su utilización va más allá. Cuando se quiere expresar algo en particular y se pretende que se comprenda de forma sencilla y sin interpretaciones erróneas, se opta por este lenguaje.
Se puede entender fácilmente qué es el lenguaje denotativo al oponerlo al lenguaje connotativo. Si el sujeto apela a metáforas, al doble sentido o a cualquier componente social o cultural que modifica o anula el significado objetivo, emplea el lenguaje connotativo.
El lenguaje denotativo, en definitiva, acude a las palabras tal como se usan literalmente. Suele ser impersonal y por lo general prescinde de lo emocional. Su objetivo principal es transmitir información objetiva.
El lenguaje denotativo resulta útil para transmitir información inequívoca.
Ventajas y desventajas de su uso
Gracias al lenguaje denotativo, al mensaje se le asigna un sentido inequívoco. El receptor no debe esforzarse por interpretarlo, con lo cual la comunicación se establece sin grandes problemas ni malos entendidos.
Esto hace que el lenguaje denotativo sea útil en el periodismo y en la docencia, por mencionar dos posibilidades. Si un periodista quiere dar a conocer una noticia o un profesor pretende impartir una clase, buscará apoyarse en el significado denotativo de las palabras para ser claro.
El lenguaje denotativo, sin embargo, puede volverse inconveniente en la literatura o la publicidad. En estos campos, es habitual que se busque transmitir emociones o sentimientos: con el lenguaje connotativo, es posible sugerir y explotar la subjetividad.
Ejemplos de lenguaje denotativo
Supongamos que alguien expresa: “El perro es un animal mamífero que pertenece al grupo familiar de los cánidos”. Puede afirmarse que esta frase fue construida con lenguaje denotativo ya que incluye información concreta y objetiva, transmitida sin rodeos.
En cambio, la expresión “Mi hermano es un perro, juega muy mal al fútbol” utiliza el lenguaje connotativo. Quien habla no está indicando que realmente su hermano es un “perro” (es decir, un cánido), sino que está dando a entender que carece de habilidades para la práctica de un deporte.
Veamos ahora qué ocurre con el concepto de “nubes”. Una persona que señala que “hay muchas nubes en el cielo” está empleando lenguaje denotativo: cuenta qué es lo que ve al levantar la vista. Sin embargo, si acusa a otro individuo de “estar en las nubes” no le está diciendo que físicamente se encuentra a una gran altura, sino que le está marcando una distracción.
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