El policultivo se asocia a la agricultura de pequeña escala.
Un policultivo es una combinación de cultivos de distintas especies en una misma superficie agrícola. De esta forma se busca respetar o reproducir, en cierto modo, la biodiversidad de los ecosistemas.
Puede decirse que el policultivo es una modalidad de agricultura que produce diferentes plantas usando un mismo suelo. Estas técnicas permiten obtener una variedad amplia de alimentos, con lo cual se logra un efecto positivo para la salud de las personas. Asimismo benefician al medio ambiente ya que reducen la erosión y favorecen un control biológico de plagas.
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ResumenPrincipales características
Los policultivos implican la asociación de semillas de distintos cultivos en un determinado lote. La siembra de todas las especies suele ser simultánea, generando una convivencia entre todos los vegetales. Su desarrollo se enmarca en la llamada permacultura, un sistema que se basa en el funcionamiento de los ecosistemas naturales.
De este modo, con los policultivos se busca una autorregulación que se inspira en la naturaleza. Por eso estas prácticas se consideran como parte de la agricultura sostenible.
Es posible encontrar policultivos en huertos familiares y jardines comestibles, contribuyendo a la soberanía alimentaria. Otras características de los policultivos son que no emplean técnicas productivas a gran escala y que hacen un uso acotado de agua.
Estas particularidades permiten diferenciar a los policultivos de los monocultivos, que son explotaciones agrícolas de tamaño grande donde se gestiona una única clase de cultivo. Así, los monocultivos aplican técnicas de producción de gran escala para obtener un mayor rendimiento y minimizar los costos.
Los policultivos contribuyen a la conservación de suelos saludables.
Ventajas del policultivo
En comparación al monocultivo, un policultivo ayuda a la conservación del suelo ya que sus técnicas posibilitan que el terreno logre recuperar los nutrientes. Esto lleva a que la erosión se reduzca.
Por otra parte, sembrar distintas especies hace que mejore la diversidad biológica. A su vez, la biodiversidad agrícola refuerza la seguridad alimentaria.
Otra ventaja del policultivo es que las plagas tienen un impacto menor respecto al monocultivo y pueden controlarse naturalmente. Por lo tanto hay una menor necesidad de utilizar productos químicos.
Plantas más resistentes a los fenómenos meteorológicos y con mejor adaptación al cambio climático y una menor cantidad de malas hierbas también son ventajas que ofrecen los policultivos.
Un uso eficiente de recursos es posible con un policultivo.
Distintas técnicas
Un policultivo puede desarrollarse de diversas formas. Una técnica habitual es la rotación de cultivos: se alternan especies de familias distintas y con necesidades diferentes en cuanto a la nutrición, generando ciclos sucesivos. De esta manera, se evita que las eventuales enfermedades que aparezcan se mantengan en el tiempo (ya que las plantas cambian) y se protege al suelo de un posible agotamiento.
Los cultivos intercalados, en tanto, consisten en la interposición entre sí de varias especies en una misma temporada. Pueden escogerse plantas con diferentes época de siembra y disposición.
La asociación de cultivos, por su parte, se sustenta en la plantación en conjunto de diferentes especies. Con esta práctica, se puede lograr una optimización de la polinización y de la captación de nutrientes. Las combinaciones de cultivos hacen que las plantas se complementen para la fijación de nitrógeno y contrarrestar plagas, por ejemplo.
Ejemplos de policultivos
Podemos encontrar ejemplos de policultivos en emprendimientos de agricultura familiar.
Una familia que vive en un campo puede sembrar pimientos, lechugas y tomates en su terreno, gestionando los cultivos según los preceptos de la agroecología (cuidando la eficiencia en el uso del agua y la fertilidad del suelo). La producción de alimentos locales respetando los principios de la ecología resulta clave en el desarrollo rural sostenible.
En una ciudad, asimismo, se puede llevar adelante el policultivo en terrazas de edificios. Estos huertos urbanos pueden incluir espinaca, acelga, ajo y cebolla, por mencionar algunas posibilidades.
Incluso es posible hallar ejemplos de policultivos de gran antigüedad. En la América precolombina, se conocía como «Tres hermanas» a la asociación de tres cultivos: una leguminosa, una cucurbitácea y maíz. Esta combinación permite que las leguminosas contribuyan a la fertilización del suelo mediante la fijación del nitrógeno atmosférico y que el maíz brinde soporte a dichas leguminosas, las cuales se trepan y pueden compartir espacio con las cucurbitáceas.
Dificultades e inconvenientes
Como ya vimos, los policultivos brindan numerosas ventajas gracias a las sinergias de cultivos, el manejo integrado de plagas y otros factores. Sin embargo, esta metodología también presenta inconvenientes y acarrea ciertas dificultades.
Por un lado, ofrecen un menor nivel de producción si se hace una comparación con los monocultivos. Esto se debe a que no utilizan técnicas a gran escala. Además generalmente se cultivan especies que recién brindan rendimientos en el largo plazo.
Los policultivos, por otra parte, tienen costos más altos. Como cada especie demanda un cuidado distinto, se necesita una mayor variedad de recursos e incluso de mano de obra.
No se puede dejar de mencionar que puede resultar difícil la identificación de las especies más convenientes para combinar entre sí y con el medio ambiente. Si no se analiza el panorama con conocimientos fiables, el policultivo puede fracasar.
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