
Un semillero ayuda a producir plantas para un vivero.
Un semillero es un lugar donde se almacenan colecciones de semillas para su estudio y conservación. El término además hace referencia al espacio donde los vegetales son sembrados y criados antes de su trasplante.
También conocido como almáciga o almácigo, el semillero se encuentra dispuesto de forma especial para la colocación de las semillas, de manera tal que éstas puedan germinar. Una vez que la planta ya creció, el plantín puede ser trasplantado a otro sitio sin inconvenientes.
Puede decirse que el semillero es un recinto acondicionado para que la especie vegetal en cuestión pueda dar brotes e iniciar su desarrollo. Tras esa primera etapa o fase inicial, el ejemplar se encuentra preparado para su traslado al terreno definitivo, donde completará su crecimiento.


Importancia del semillero
Los semilleros son importantes para la agricultura. Contribuyen a facilitar el primer crecimiento de la planta y a aprovechar el terreno al máximo. Es posible distinguir entre los semilleros permanentes (con bordes de cemento), los semilleros semipermanentes (con bordes de ladrillo o madera), los semilleros temporales (de único uso) y los semilleros portátiles (que se pueden llevar de un punto a otro).
Si bien los semilleros no sirven para cualquier tipo de cultivo, se trata de un recurso de gran utilidad para aquellas plantas que necesitan un estricto control de sus niveles de humedad y temperatura, por ejemplo. Entre las que no son aptas podemos mencionar el ajo, el rábano, el nabo y la zanahoria, que para no provocarles malformaciones en la raíz y problemas de crecimiento se recomienda plantar por siembra directa.

El semillero brinda protección en el inicio del ciclo de vida de una planta.
Sus ventajas
Recurrir a la creación de semilleros como paso inicial en lugar de la siembra directa tiene varias ventajas. Algunas de ellas son las siguientes:
- Permite anticipar la fecha de siembra. Dado que el recipiente es de tamaño pequeño, se puede comenzar el proceso de germinación dentro del hogar antes de que las condiciones meteorológicas sean las más recomendadas para la planta en cuestión. Por siembra directa no es fácil conseguir que una especie nazca fuera de época.
- Es ideal para controlar los niveles de humedad y temperatura, lo cual potencia las probabilidades de éxito. Esto se conecta con el punto anterior, ya que los semilleros abren las puertas a plantar especies antes de la estación del año adecuada, cuando todavía hace demasiado calor o frío, o bien cuando la humedad no es propicia para el cultivo, ya que todo esto se puede regular de manera artificial.
- Para quienes no cuentan con un huerto muy amplio, el uso de semilleros brinda la posibilidad de aprovechar mejor el espacio e ir rotando las especies cultivadas de manera organizada. No hay que olvidar que saturar el suelo es una de las peores ideas que se pueden tener en el ámbito de la agricultura.
- También sirve para cultivar plantas poco comunes en la región, precisamente porque es posible brindarles las condiciones que necesitan independientemente del clima local.
- Invitan a ver el paso a paso de la germinación, algo apasionante y enriquecedor, tanto para quienes llevan a cabo el proceso como para los niños de la casa, que pueden aprender acerca del origen de la vida y la importancia de respetarla.
Tipos de semillero
De acuerdo a sus características se puede diferenciar entre varios tipos de semillero. Ya aludimos a los permanentes, los semipermanentes, los portátiles y los temporales, aunque existen muchas otras clases.
Si nos centramos en su finalidad, podemos distinguir entre los semilleros agrícolas y los semilleros urbanos. Los semilleros agrícolas apuntan a la producción de plantas o árboles que serán explotados a nivel comercial. Un semillero urbano, en cambio, se orienta al aprovechamiento doméstico en una ciudad o a una producción a escala reducida.
Los semilleros, por otra parte, pueden desarrollarse en maceteros individuales (un recipiente por planta), en bandejas con alveolos (cada semilla tiene su compartimento) o en turba (se planta en el suelo de manera directa sin que el ejemplar sea trasladado). Los llamados semilleros en cantero o cama, por otro lado, incluyen distintas especies en un mismo espacio.

En el deporte, un semillero es una institución o un espacio que busca potenciar el talento joven a través del entrenamiento y la capacitación para el crecimiento personal y profesional.
Otras acepciones
La noción de semillero, por otra parte, puede aludir al origen de algo o de un grupo de individuos. El semillero es el lugar donde se produce el nacimiento o la iniciación, y desde donde las cosas se propagan.
En el ámbito del fútbol, por ejemplo, puede decirse que Sudamérica es el semillero del cual se nutren los clubes europeos más importantes. Muchos de los mejores futbolistas que compiten en los torneos de Europa surgieron de América del Sur, como el argentino Lautaro Martínez, el brasileño Raphinha y el uruguayo Federico Valverde.
Esta noción de semillero deportivo también se vincula a ideas como cantera (fútbol) o divisiones formativas o inferiores. El semillero de un club reúne a las promesas jóvenes con potencial para destacarse en su disciplina: antes del debut profesional de cada atleta, se trabaja en su preparación física, técnica y emocional. Diversos expertos, en este marco, buscan contribuir a la etapa inicial de la trayectoria del deportista para que pueda tener éxito en su carrera.