Un sustantivo es una clase de palabra que puede funcionar como sujeto de una oración y que designa o identifica a un ser animado o inanimado.
En las lenguas romances, como el español, los sustantivos varían según el género (másculino / femenino) y el número, con lo cual siempre se debe prestar atención a la concordancia. En otros idiomas, como el chino, los sustantivos nunca varían. Hay lenguas donde incluso no existen propiedades formales diferentes entre los sustantivos y los verbos, como el náhuatl.
Tipos de sustantivos
Desde un punto de vista semántico, los sustantivos se dividen en:
- Sustantivos concretos: hacen referencia a conceptos independientes, que podemos percibir con nuestros sentidos, o bien imaginar y asumir que existen en nuestro mismo plano (una silla, un ordenador o computadora, una persona).
- Sustantivos abstractos: al contrario del caso anterior, se trata de conceptos dependientes, que sirven para designar entidades imperceptibles por nuestras capacidades sensoriales, pero perceptibles a través del pensamiento («amistad», «amor», «maldad», «fe»).
A su vez, los sustantivos abstractos pueden ser clasificados en:
- Abstractos de cualidad: tienen relación con adjetivos y representan propiedades o cualidades de seres animados o inanimados («fealdad», «altura»).
- Abstractos de fenómeno: sirven para designar estados, acciones o sus consecuencias («ejercicio», «estudio»).
- Abstractos de números: permiten cuantificar otros sustantivos con diversos grados de precisión («ramo», «grupo», «cantidad»).
Clasificación según la cualidad de únicos
- Sustantivos comunes: considerados sustantivos de tipo genérico, se usan para referirse a cualquier integrante de una misma especie o clase sin adentrarse en sus características particulares («mujer», «perro», «coche»).
- Sustantivos propios: sirven para distinguir a cada individuo de los demás, como ocurre con los nombres de las ciudades o de las personas, y deben ser escritos con su letra inicial en mayúscula («Tokio», «Cecilia»).
Sustantivos según el tipo de referencia y su composición
De acuerdo a la referencia:
- Sustantivos individuales: cuando presentan su forma singular hacen referencia a un solo ejemplar de una clase o especie («hoja», «arroyo», «montaña»). En idiomas cuya gramática contempla la forma plural, como ocurre con el castellano, estos sustantivos pueden designar a un grupo (indefinido a menos que se agregue información numérica).
- Sustantivos colectivos: se utilizan para nombrar a un grupo de objetos o seres, incluso en su forma singular («arboleda», «manada», «jauría»). En su forma plural, dan la idea de conjuntos de una misma clase independientes unos de otros.
A partir de su composición:
- Sustantivos simples: se trata de palabras formadas por un solo término («vaso», «control», «carcasa»).
- Sustantivos compuestos: se forman con la unión de dos palabras simples («parabrisas», «cuentagotas», «guardameta», «cortafuegos»).
División por la complejidad de su morfología o por su origen
- Sustantivos primitivos: son aquellos que tienen el rol principal en una familia de palabras, que representan su raíz y se forman a partir de un lexema básico (unidad mínima, sin morfemas gramaticales). Pueden o no adoptar morfemas para su género y número («flor», «mar»).
- Sustantivos derivados: se generan partiendo de los términos primitivos, gracias al uso de afijos como infijos, prefijos o sufijos («floristería», «marino»).
- Sustantivos aumentativos: se usan para referirse a seres animados o inanimados de considerables dimensiones o de gran intensidad («cochazo», «notición», «golpazo», «espadota»).
- Sustantivos diminutivos: constituyen el caso opuesto a los aumentativos («perrito», «perita», «casita», «paquetín»).
- Sustantivos despectivos: como su nombre lo indica, sirven para mencionar con desprecio a seres u objetos, intentando restarles valor o importancia («cuartucho», «casucha», «gentuza», «poblacho»).
- Sustantivos gentilicios: existen a partir del nombre de un país, una ciudad o cualquier territorio reconocido oficialmente, y se utilizan para hacer referencia al lugar de procedencia de una persona, un animal o una cosa («japonés», «norteamericano», «italiano»).
Clases de sustantivos según la contabilidad
- Sustantivos contables: son conceptos que pueden ser contados («piedra», «taza», «moneda»).
- Sustantivos incontables: designan conceptos que no pueden ser divididos en porciones contables («agua«, «felicidad», «oxígeno», «gas», «aceite»).
La sustantivación
Se menciona como sustantivación a un proceso que permite ampliar el léxico a partir de la creación de sustantivos.
La sustantivación sintáctica consiste en emplear un término como núcleo de un sintagma nominal cuando, a nivel morfológico, no se trata de un sustantivo. La sustantivación morfológica, por su parte, es una derivación que permite generar un sustantivo partiendo de un adjetivo o un verbo.
Cuando se habla del «buen comer», por ejemplo, «comer» funciona como un sustantivo gracias a la sustantivación sintáctica. «Brillantez», en tanto, es fruto de una sustantivación morfológica (deriva del adjetivo «brillante»).
Ejemplos de sustantivos
Podemos encontrar una enorme cantidad de ejemplos de sustantivos, como ya hemos indicado a lo largo de este artículo.
Es interesante mencionar, en los primeros años de la escuela primaria, suelen estudiarse los sustantivos bajo la denominación de nombres. Así se distingue entre el nombre propio (el sustantivo propio) y el nombre común (el sustantivo común) como un primer acercamiento a los distintos componentes de una frase y a cada categoría gramatical.
Así, entre los ejemplos de sustantivos que se estudian en dicho nivel educativo, podemos encontrar palabras como «casa», «perro» y «pelota», clasificados como nombres comunes. Entre los nombres o sustantivos propios, se suele aludir a países («España», «Argentina», «China») o ciudades («Londres», «Río de Janeiro», «Ciudad del Cabo»).