Termoplástico es un adjetivo que permite calificar al material que resulta maleable ante el calor. En otras palabras: un termoplástico, al encontrarse a una temperatura elevada, pierde su estado rígido y se deforma.
Los termoplásticos, cuando son calentados, se funden y se derriten. Una vez que se enfrían, recuperan su consistencia. Esto permite que puedan ser moldeados según distintos objetivos.
Es importante tener en cuenta que los materiales termoplásticos disponen de lo que se conoce como un historial térmico. A medida que se calientan y se enfrían en varias ocasiones, sus propiedades físicas van modificándose de forma gradual ya que se debilitan sus enlaces.
Uso de materiales termoplásticos
Las impresoras 3D suelen funcionar con termoplásticos. El material fundido permite ser moldeado y luego, cuando la temperatura desciende, adquiere la solidez necesaria para conservar la forma deseada.
El policloruro de vinilo (conocido por la sigla PVC), el poliestireno, el nailon, el teflón, el polipropileno y el polietileno son algunos de los termoplásticos más empleados en todo el mundo. Es posible encontrar una gran cantidad de productos fabricados con estos materiales.
Además de estos mencionados, tampoco podemos pasar por alto el polimetil-metacrilato (PMMA), que se utiliza para crear desde gafas protectoras hasta señales de publicidad, por ejemplo.
Más características
Además de las características subrayadas, se hace necesario proceder a conocer otras que igualmente resultan interesantes:
- Tienen la particularidad de que pueden disolverse en ciertos productos.
- Cuentan con una notable resistencia a la deformación mediante fluencia.
- El termoplástico llamado policarbonato se ha convertido en uno de los más importantes del momento por el hecho de que es el que se utiliza para llevar a cabo la creación de CD, botellas de refrescos y gafas.
- El ABS, cuyo nombre completo es acrilonitrilo butadieno estireno, se emplea mucho para darle forma a juguetes tales como los bloques de la firma Lego, o a todo tipo de materiales que se emplean en las oficinas.
- El PVC (policloruro de vinilo), por otro lado, es un termoplástico que en estos momentos se utiliza con gran frecuencia dentro del ámbito de la rotulación para la realización de todo tipo de rótulos para empresas, tales como logos, letras corpóreas, carteles luminosos…
Diferencias entre termoplásticos y termoestables
Mientras que los termoplásticos se funden al ser sometidos a un calor elevado, los materiales termoestables no cambian su estructura: directamente se queman. Esto hace que no se puedan moldear.
La diferencia entre los materiales termoplásticos y los materiales termoestables se encuentra en sus cadenas y enlaces. En los termoestables, el calor provoca que sus cadenas se vuelvan más compactas y resistentes. Por eso finalmente el material termina degradándose y no se puede moldear y reutilizar.