La viola es un instrumento de música equipado con cuerdas, que se toca con un arco. Se trata de un instrumento similar al violín, aunque más grande y capaz de producir sonidos de tonos más graves.
Surgida en el siglo XIV, la viola dispone de cuatro cuerdas que se afinan en intervalos de quintas. La cuerda más grave es do y le siguen sol, re y la. Cabe destacar que la tesitura de la viola se ubica entre los sonidos graves del violín y los agudos que puede generar un violonchelo.
Tipos de viola
A lo largo de la historia se crearon diferentes tipos de viola, con distintos números de cuerdas y características particulares.
En este sentido, se puede nombrar a la viola de amor (que consta de catorce cuerdas, aunque solo se tocan siete), la viola da gamba (seis cuerdas que se afinan por cuartas), la viola de arco (tradicional de la música medieval), la viola da braccio (se toca apoyada en el hombro o en el pecho), la viola bastarda (también llamada lira viola) y la viola pomposa (de cinco cuerdas).
Compositores y violistas
George Philipp Telemann fue el creador del primer concierto para viola, presentado en 1731. Poco tiempo después, muchos compositores aportaron sus creaciones, como Carl Friedrich Zelter, Franz Anton Hoffmeister, Johann Stamitz, Lionel Tertis, Johann Christian Bach y Johannes Brahms.
Entre los principales violistas contemporáneos, se destacan el estadounidense Joseph de Pasquale, la alemana Tabea Zimmermann, el francés Gérard Caussé, la japonesa Nobuko Imai y el suizo (nacido en Bielorrusia) Viacheslav Dinerchtein.
Sonido de la viola
Así como el violín, el violonchelo y el contrabajo, la viola es un instrumento capaz de producir sonidos de gran belleza, pero exige una dedicación considerable para aprender a ejecutarlo, además de una gran destreza motora y una profunda percepción musical. Entre las dificultades que supone la viola se encuentra el hecho de no ser un instrumento temperado, es decir que no tiene simplemente los doce sonidos que encontramos en una octava según los descubrimientos de J. S. Bach, quien dio origen al Sistema Temperado.
A diferencia de los instrumentos temperados, entre los cuales encontramos el piano, los de cuerda con trastes (como ser la guitarra) y los de pistones o llaves (como la trompeta y el clarinete), la viola exige al músico que halle los diferentes sonidos y memorice la posición de cada uno de ellos, ya que la afinación depende directamente del punto en el cual presionemos cada cuerda. Esto hace que la primera etapa del aprendizaje sea muy ardua, tanto para el estudiante como para su entorno, ya que deben soportar sonidos muy desafinados y estridentes durante semanas.
Sus partes
Entre las partes más importantes de la viola se encuentran la siguientes:
- El cuerpo: es la más grande, ya que representa casi la totalidad del instrumento. Tradicionalmente, se fabrica en madera.
- La mentonera: una pieza ovalada de plástico o madera sobre la cual el músico apoya el mentón.
- El cordal: se encuentra cerca de la anterior y es uno de los dos extremos a los cuales se aferran las cuerdas.
- Las clavijas: donde se enrollan las cuerdas, con diferentes grados de tensión para conseguir la afinación deseada.
- El puente: suele tener un color más claro que el resto de las piezas, y sirve para sostener las cuerdas cerca de las clavijas.
Viola como conjugación de violar
La palabra viola, por otra parte, también se corresponde con la conjugación del verbo violar en la segunda persona del singular, en el tiempo Presente del modo Indicativo: «él o ella viola».
Con respecto a este verbo, su significado es amplio, ya que puede entenderse como: infringir un tratado, una promesa, un precepto o una ley; mantener relaciones sexuales con una persona contra su voluntad, ya sea que ésta se encuentre consciente o inconsciente; o profanar un sitio sagrado. Cabe mencionar que violar también puede ser un sustantivo, y en este caso significa «un lugar en el cual hay plantadas violetas».