Apropiado es un adjetivo que califica a aquel o a aquello que resulta acorde, coherente o afín a ciertas condiciones o necesidades. Por ejemplo: “Creo que el nuevo gobernador ha dado un discurso apropiado al contexto social”, “Tenemos que contratar a un gerente con el perfil apropiado para que la empresa mantenga su crecimiento”, “Ese traje no es apropiado para un evento de este tipo”.
Lo apropiado, en este marco, es algo lógico o congruente con el entorno o el estado de las cosas. Si un abogado debe acudir a una entrevista laboral, lo apropiado es que lleve camisa, corbata y saco. En cambio, si luce un short y una camiseta de fútbol, su vestimenta no será la adecuada para una reunión de trabajo.
Lo apropiado y el contexto
Así como cualquier otro término de naturaleza subjetiva, apropiado no suele usarse para calificar algo innegable y necesariamente válido (como una propiedad del campo de la física que siempre se cumpla), sino que señala cuestiones enmarcadas en un contexto cultural, el cual a su vez se ve limitado por la época a la que pertenece.
Retomando el ejemplo de la vestimenta que resulta apropiada para una entrevista de trabajo, es importante señalar que en la actualidad existen muchas empresas que admiten el uso de ropa informal a sus empleados. Si bien esto no se da en el ámbito del derecho, por lo cual los abogados aún tienen la obligación de vestir formalmente, es moneda corriente en la industria de la tecnología, especialmente en el desarrollo de software.
Esto no siempre ha sido así, ya que incluso en dicho rubro se imponía el uso de vestimenta formal a finales de los años 80 y principios de los 90. Este cambio no hace otra cosa que confirmar el carácter subjetivo del término, ya que incluso en un mismo edificio puede adoptar significados diferentes de un año a otro, de un día a otro.
Una cuestión de seguridad
Ciertos objetos tienen un uso apropiado y otros que no son correctos y que incluso pueden resultar peligrosos. El uso apropiado de una tijera consiste en aplicar fuerza para cortar papeles o cartones: no es apropiado emplearla para amenazar a otra persona ni para cortar madera. Tampoco es apropiado utilizar un revólver para festejar, disparando al aire, ya que esta práctica podría derivar en la muerte de cualquier persona a causa de las balas.
Por otro lado, los fabricantes suelen indicar el uso apropiado de sus productos en un apartado del manual de usuario, para minimizar los riesgos de accidentes, así como las probabilidades de demandas judiciales por parte de sus clientes. Claro que esto muchas veces no es más que una mera lista de sugerencias, y no de verdades absolutas; por ejemplo, para algunos productos no se recomienda el uso de pilas recargables, pero esto no impide que millones de personas las utilicen y que no sufran ninguna consecuencia negativa, como ser un mayor deterioro.
Apropiado como conjugación de apropiar
Apropiado, por otra parte, es una conjugación del verbo apropiar: quedarse con la propiedad de algo. Más precisamente, es su participio, y puede usarse para la formación de tiempos compuestos, como se aprecia a continuación: “No me he apropiado de ninguna pertenencia de esa mujer: la denuncia es falsa”, “Acusan al alcalde de haberse apropiado de fondos destinados a la realización de obras públicas”, “La empresa se ha apropiado de espacio público que pertenecía a todos los vecinos: ¡exigimos que nos devuelva el terreno!”.
Dependiendo del país de habla hispana, el uso de los tiempos compuestos es más o menos frecuente, y por lo tanto puede resultar formal o coloquial. En Argentina es más habitual recurrir al pretérito perfecto simple («El alcalde se apropió de los fondos públicos»), mientras que en España ocurre justo lo contrario.