Autótrofo es un adjetivo que se utiliza para calificar a los organismos que pueden tomar sustancias inorgánicas y transformarlas en las materias orgánicas que necesitan para subsistir.
Los organismos autótrofos, por lo tanto, pueden sintetizar sustancias orgánicas partiendo de otras inorgánicas. Esto quiere decir que no requieren alimentarse de otros seres vivientes.
La etimología
Para avanza con el significado del término, hay que descubrir primero su origen etimológico. En este caso, cabe decir que se trata de una palabra que es un neologismo formado a partir de la suma de dos palabras de origen griego:
- El sustantivo autos, que puede traducirse como «por sí mismo».
- El nombre trophos, que es sinónimo de «alimento» o de «nutrición».
Características de los autótrofos
Dicho de un modo simplificado, los seres autótrofos son aquellos que se encargan de la generación de sus propios alimentos. Su fuente de carbono es el dióxido de carbono, mientras que producen energía a partir de elementos químicos o de la luz.
Entre los organismos autótrofos encontramos a las plantas y a algunas bacterias. En el caso de las plantas, estas especies recurren a la fotosíntesis: el proceso que permite convertir la materia inorgánica en orgánica mediante la luz. La energía lumínica que reciben de los rayos del sol es transformada en energía química, almacenándola en moléculas de adenosín trifosfato (conocido como ATP). Luego, el ATP posibilita la síntesis de otras moléculas orgánicas más estables.
Otros organismos autótrofos apelan a la quimiosíntesis. Se trata de bacterias que sintetizan el ATP tomando la energía liberada en reacciones de compuestos inorgánicos que han sido reducidos.
Sus fases
Cuando se habla de nutrición autótrofa se establece que la misma se compone de tres fases fundamentales:
- Paso de membrana. Esta es la fase en la que las moléculas inorgánicas sencillas (agua, dióxido de carbono y sales), mediante la absorción directa, atraviesan la membrana celular.
- Metabolismo. Cuando se produce esta segunda fase tiene lugar un conjunto de reacciones de tipo químico en la zona del citoplasma celular. Eso da lugar tanto a la fabricación de materia celular propia como a la obtención de energía bioquímica utilizable. Esta segunda fase de la nutrición autótrofa se divide a su vez en tres periodos: la fotosíntesis, el anabolismo (que también se conoce como fase de construcción) y el catabolismo (llamada asimismo fase de destrucción).
- Excreción. Con esta última fase se acaba el proceso de la nutrición. Consiste básicamente en la eliminación de los productos de desecho del metabolismo. Se realiza mediante la membrana celular.
Autótrofos y heterótrofos
Mientras que las plantas y ciertas bacterias se generan su propio alimento y son autótrofos, otros organismos necesitan alimentarse con otros seres vivos para obtener las sustancias que les permiten producir moléculas orgánicas de complejidad. Todos los animales, incluyendo al ser humano, son heterótrofos.
Estos heterótrofos consiguen energía al romper las moléculas de los organismos autótrofos que ingieren. Cuando un animal carnívoro se come a otro animal, la energía también tiene su origen en un ser autótrofo (ingerido en una primera etapa por la presa devorada).