Betún es la denominación genérica de diversas sustancias que se hallan en la naturaleza y cuyos componentes principales son el hidrógeno y el carbono. Cuando el betún -término que deriva del vocablo latino bitūmen- es llevado al fuego, emana un aroma característico y un humo de gran espesor.
También llamado bitumen, el betún puede ser un producto que deriva del alquitrán (una sustancia líquida, viscosa y de tonalidad oscura que se consigue a partir de la destilación de petróleo, carbón, madera y otros materiales). El betún, en este sentido, se usa para pavimentar e impermeabilizar.
La pavimentación de caminos (como carreteras o rutas, calles y avenidas) y la impermeabilización de embarcaciones son dos de las utilizaciones del betún, que puede contener plomo, mercurio, arsénico y azufre, entre otros elementos.
Betún para el calzado
El betún para el calzado es una mezcla de diferentes componentes que, ya sea como crema o en formato líquido, se utiliza para proteger, dar lustre y embellecer productos de cuero. Esta clase de sustancia empezó a fabricarse a nivel industrial en el siglo XX incluyendo parafina, goma arábiga y otros elementos.
Si bien en muchos países de habla hispana se denomina del mismo modo, este producto para mejorar el aspecto de los zapatos recibe otros nombres, como los siguientes: en España, crema para calzado; en Venezuela, crema de zapatos; en México, cera, cobertura o grasa para zapatos, aunque también pasta para calzado; en Argentina y Uruguay, en tanto, se lo conoce como pomada de calzado o pomada para zapatos.
La necesidad del ser humano de engrasar su calzado data de hace varios siglos, y para ello ha usado varias sustancias. En un principio, esta técnica que también extiende la vida de los zapatos, se llevaba a cabo usando sebo o ceras, entre otros productos de origen natural. Como se menciona anteriormente, su fórmula moderna es diferente; entre sus ingredientes, hay algunos que pueden resultar nocivos para nuestra piel, dada su toxicidad.
Desde comienzos del siglo XIX, la popularidad de este tipo de betún comenzó a crecer, así como la del calzado, tanto de cuero como de materiales sintéticos. Aunque sea lamentable, la necesidad de lustrar las botas de los soldados durante las Guerras Mundiales fue un factor determinante en dicho aumento. Entre las marcas más populares a nivel internacional se encuentra Kiwi, la cual es originaria de Australia y se fundó en 1904.
Preparación hogareña
Algunas personas prefieren preparar el betún por su cuenta, ya sea por cuestiones económicas o para conseguir resultados muy específicos. Los ingredientes para una receta muy común de betún neutral son parafina, cera de carnaúba, colorante, disolvente y esencia de mirbano; con respecto a los materiales, basta con una olla, una cuchara de madera y envases de plástico o metal.
El procedimiento es relativamente sencillo:
- Fundir la cera con la parafina y revolver hasta que la mezcla se derrita.
- Retirar del fuego y agregar el disolvente, sin dejar de revolver.
- Añadir la esencia de mirbano, la cual aporta el aroma que solemos asociar con el betún.
- Dejar que descienda la temperatura y, cuando la mezcla se encuentra casi en estado sólido, verterla en los envases.
Si deseamos obtener un color en particular, entonces debemos añadir el colorante deseado antes del disolvente.
Diversos tipos de betún
Se conoce como betún de Judea, por otra parte, al asfalto que proviene del mar Muerto y a un aceite espeso usado para envejecer obras creadas de manera artesanal.
El zulaque (una pasta que se fabrica con vidrio molido, aceite, cal y estopa y que se usa para tapar juntas) y la cobertura de pasteles o dulces que se hace con clara de huevo y azúcar también se denominan betún.