Cultura mixteca es la denominación que identifica a una civilización autobautizada como ñuu Savi que se asentó en una zona antiguamente conocida como Ñuu Dzahui (esta expresión vinculada a las precipitaciones solía representarse mediante un cerro en el cual se lucía una máscara, la de Dzahui, el patrono de este poblado). Con el transcurso de los años, ese territorio mexicano que se sitúa entre los estados de Guerrero, Oaxaca y Puebla comenzó a ser reconocido popularmente como La Mixteca.
Registros históricos e investigaciones han permitido reconstruir la historia, el estilo de vida, las creencias y otras cuestiones que permiten, hoy en día, saber cómo ha surgido, consolidado su identidad y progresado este pueblo que nació a fuerza de una diversificación cultural y cuya mitología posee puntos en común con otras tradiciones de Mesoamérica.
Monte Albán y San José Mogote, principalmente, los vieron instalar su urbanización, al igual que en el área de valles de la sierra mixteca, aunque allí en menor medida. Desde el siglo XIII en adelante, la cultura mixteca floreció de modo significativo. Al repasar sus áreas de influencia y los centros urbanos ligados a esta comunidad alcanzan visibilidad, además de los citados líneas arriba, lugares como Mitla, Tututepec, Achiutla, Tlaxiaco y Zaachila.
Riquezas de la cultura mixteca
La cultura mixteca atesora riquezas de valor incalculable vinculadas a la expresión tanto oral como escrita, la fe, el arte, el baile, la música y la construcción.
Es interesante tener en cuenta que la escritura mixteca tuvo modalidad pictográfica. Diversos códices mixtecos como el Codex Vindobonensis, el Codex Zouche-Nuttall, el Codex Colombino-Becker y el Selden sirven como prueba de ello. Gracias a la escritura se ha logrado documentar tanto la historia como las costumbres de esta comunidad que cultivaron numerosas variedades lingüísticas que nutrieron al idioma mixteco.
En materia creativa, en tanto, esta sociedad, en época prehispánica, forjó un arte mixteco inspirado en sus creencias. Muchas obras ostentosas se destinaron a rituales y altares establecidos en templos.
Comparándolos con el pueblo zapoteco, por ejemplo, los mixtecos no tuvieron un gran desempeño trabajando con piedra en escultura o arquitectura. Analizando obras halladas al excavar diferentes sitios se advierte que gran parte de los materiales utilizados para proyectos de arquitectura mixteca destinados a viviendas de clases sociales bajas no se caracterizaba por su resistencia.
En general, los mixtecos moldearon artesanalmente cerámica a fin de generar piezas a través de las cuales se evidencia cómo influyeron en ellos los estilos zapoteca y olmeca. En la zona de la Mixteca Baja, por ejemplo, sobresalió el llamado estilo ñuiñe, el cual se complementó con una impronta teotihuacana. Han surgido en este marco cabecitas colosales y obras inspiradas en el dios del fuego. En la era posclásica, la cerámica mixteca sumó más decoración y alcanzó un acabado más delicado. En Yucuñudahui y varias zonas más se hallaron, por ejemplo, estelas mixtecas que dejan al descubierto la esencia de su arte.
Los mixtecos creían en muchos dioses. Varias divinidades, desde la perspectiva de este pueblo, simbolizaban fuerzas propias de la naturaleza, entorno en el cual se acumulaban espíritus de antepasados. Estos hombres y mujeres que le rendían culto al dios de la lluvia (Dzahui), al dios de la muerte, al dios del fuego y al dios de la fertilidad, entre muchos otros, respetaban una jerarquía donde figuraban los yaha yahui. Así se mencionaba a los sacerdotes mixtecos que, para ellos, contaban con la habilidad de transformarse en animales y adquirir un inmenso poder. En conclusión, la religión mixteca fue animista.
Gastronomía mixteca
En la gastronomía mixteca se priorizan alimentos procedentes de la tierra. No debería dejar de destacarse, en este marco, que la agricultura mixteca ha tenido, a lo largo del tiempo, logros y avances impactantes. Esta comunidad se adaptó a la naturaleza para aprender a sacar lo mejor de terrenos poco fértiles y consiguió técnicas eficientes para cultivar diferentes comestibles.
Calabaza, frijol y maíz son sus productos estrella, así como el cacao y los chiles los animaron a condimentar y a crear nuevos sabores.
El huaxmole (vocablo que puede traducirse como guiso de guajes) es uno de los platos típicos de esta cultura. El maguey pulquero, en tanto, es un gran aliado para elaborar artesanalmente una bebida tradicional bautizada como pulque.
Otros datos de interés sobre la cultura mixteca
A continuación compartiremos otros datos de interés sobre la cultura mixteca debido a la enorme cantidad de información que se ha logrado recopilar sobre este pueblo que ha dejado huellas profundas e imborrables en México.
Resulta muy interesante saber, por ejemplo, que el calendario mixteco contenía 260 días y en él había signos para identificar a cada año y logogramas que funcionaban como una convención cada vez que había que registrar desde fechas hasta nombres calendáricos con un sistema numeral a base de puntos. También atrae conocer la medicina tradicional mixteca, contexto en el cual se ha erigido el mezcal como un remedio y se le da espacio a múltiples elementos de la naturaleza (como agua, plantas, minerales y especies animales) por reconocerles propiedades curativas.
Los guerreros mixtecos y el Señor 8 Venado (rey mixteco también apodado Ocho Venado Garra de Jaguar), al igual que las leyendas mixtecas y los ritos funerarios mixtecos, siguen mereciendo difusión a escala internacional ya que enseñan acerca de creencias, organización tanto social como política y saberes que se constituyeron como señas de identidad de un pueblo de gran antigüedad.