Quienes se especializan en derecho de sucesiones se encargan, básicamente, del proceso vinculado al traspaso de bienes de un sujeto fallecido a quienes, legalmente, están declarados y reconocidos como herederos.
El derecho de sucesiones es una de las especialidades jurídicas que se enmarcan en el derecho civil. Esta rama, conocida también como derecho sucesorio, permite regular y establecer el destino de los bienes de alguien que ha fallecido y que, tras el desarrollo de un proceso legal, se repartirán entre los herederos.
Es importante saber que existen diferentes tipos de sucesiones, distintos sistemas para organizarlas y que cada nación tiene sus propias normativas al respecto. Como es un asunto complejo, y en ocasiones conflictivo cuando no hay acuerdos entre todos los sujetos involucrados en este procedimiento que suele demorar un cierto tiempo, es indispensable asesorarse con abogados especializados en esta rama del derecho y seguir sus indicaciones.
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ResumenConceptos clave del derecho de sucesiones
En el derecho de sucesiones entran en juego numerosos conceptos clave que es conveniente conocer y comprender para poder tener, al menos, una noción básica acerca de los alcances, las aplicaciones, la importancia de este tipo de derecho y las figuras que intervienen en él.
En primer lugar es útil estar al tanto del significado de sucesión, palabra con varias acepciones que, de acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE), sirve para, por ejemplo, describir la adjudicación de bienes de un individuo a otro sujeto que se acepta como legatario o heredero.
Legatario, término aceptado como sinónimo de beneficiario y heredero, refiere a la persona, ya sea jurídica o natural, que resulta beneficiada por un testador en base a por lo menos una manda (es decir, el legado propio de un testamento) a título singular. En este marco no se puede pasar por alto que heredero es aquel sobre el cual recae una herencia. Se reconocen las figuras de heredero/a forzoso/a (o legítimos, señalados legalmente como favorecidos en caso de no haber testamento) y de heredero/a testamentario (designado en un testamento por el propio testador).
Vale señalar que se considera testamento al documento respaldado por la ley que sirve como constancia de la última voluntad expresada por el testador, quien expresa allí cuestiones vinculadas a la etapa que le sigue a su deceso, entre ellas el reparto o disposición de su patrimonio. Ese ser que, a raíz de su muerte, motoriza toda la dinámica propia del derecho de sucesiones está considerado como causante. El individuo que un juez o testador escoge para que custodie los bienes de un difunto y se encargue de hacer cumplir la última voluntad de ese fallecido, por otra parte, se define como albacea.
La alternativa conocida como nuda propiedad permite que alguien le haga en vida a sus herederos una donación considerada como un anticipo de la herencia. En este caso, el usufructo del inmueble es del titular del bien hasta el momento de su fallecimiento, sin que los herederos puedan hacer uso de dicha propiedad.
Tipos de sucesión y testamentos
Es enriquecedor, incluso, instruirse en relación a qué tipos de sucesión y de testamentos existen.
A grandes rasgos, en Derecho se distingue entre sucesión universal (aquella que marca que las obligaciones, derechos y bienes de alguien fallecido se transmiten a la cantidad de herederos que corresponda), sucesión forzosa (modalidad en la cual el causante no puede entorpecer ni modificar la sucesión establecida formalmente), sucesión testada (regulada en base a la voluntad expresada por el causante y ha sido declarada con las formalidades propias del ámbito legal) y sucesión de carácter intestado (esa que se desarrolla ante la falta de un testamento válido y avanza por disposición de la legislación vigente).
La clasificación de los testamentos, por otra parte, da lugar a las categorías de testamento cerrado (aquel que se sella y se avala con un escribano o notario para que nadie conozca su contenido mientras viva el testador), testamento ológrafo (variedad que debe ajustarse a ciertos requisitos para ser validado, como por ejemplo estar redactado de puño y letra por quien tiene el rol de testador), testamento por acto público (concedido a través de una escritura pública en presencia de un par de testigos y con el aval de un notario público) y de testamento por acto privado (testamento especial y excepcional que se admite como válido en casos de emergencia que impidan la elaboración de un testamento ológrafo). Existen, asimismo, el testamento nuncupativo (que requiere la presencia de tres testigos para que el testador, en ausencia de un notario, exprese su última voluntad verbalmente), el testamento militar (reservado a combatientes heridos en el campo de batalla o destinados a intervenir en un conflicto bélico) y testamento en vida (living will).
Cuando alguien muere debe iniciarse ante la Justicia un proceso sucesorio que le permita a los herederos del causante repartir los bienes y disponer de ellos.
Otros datos de interés sobre el derecho de sucesiones
Al investigar de qué se trata el derecho de sucesiones, cuáles son los pasos a seguir hasta lograr la adjudicación de una herencia, qué derechos y obligaciones tienen los herederos y qué implicaciones fiscales hay en este contexto salen a la luz diversos datos y temas de interés.
Adquieren relevancia, por ejemplo, el orden que se sigue para establecer qué parientes del causante poseen el derecho a recibir la herencia y en qué proporción: hijos, nietos, padres, abuelos, hermanos, tíos, primos y cónyuge supérstite que no haya tramitado el divorcio o que no se encuentre separado/a por vía legal.
Profundizando en esta temática se acumula información, incluso, sobre el denominado impuesto de sucesiones y es posible analizar la jurisprudencia con el objetivo de saber cómo actúa la Justicia en casos de conflictos sucesorios.
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