La energía mareomotriz es aquella que se genera a partir de la actividad de las mareas oceánicas. Por eso también recibe el nombre de energía oceánica.
Se trata de una energía renovable ya que las mareas son virtualmente inagotables. La energía mareomotriz, asimismo, es una energía verde: no solo es una energía sostenible, sino que también es limpia (su generación no produce contaminación).
Características de la energía mareomotriz
La energía mareomotriz se basa en el aprovechamiento del movimiento que llevan adelante las mareas. Se denomina marea, justamente, al movimiento alternativo y periódico que, debido a la fuerza gravitatoria de la luna y el sol, desarrollan grandes masas de agua.
Las mareas pueden ser descendentes o ascendentes. Para aprovechar la energía mareomotriz, se requiere la construcción de infraestructuras marinas con instalaciones subacuáticas que se valen de los principios de la energía potencial y la energía cinética para lograr la transformación del movimiento de las mareas en energía eléctrica.
Funcionamiento de las centrales
Las centrales de energía mareomotriz funcionan con diques, turbinas y alternadores. En bahías o estuarios, se crean los diques que disponen de turbinas en su sector inferior.
El embalse en cuestión, con los movimientos de las mareas, se llena y luego se vacía de forma periódica. La circulación del agua hace que las turbinas mareomotrices se activen y, con los alternadores, se logre la generación de la electricidad.
Una vez obtenida la energía eléctrica, el proceso continúa con el transporte de la misma hasta la tierra. Allí, una nueva central se encarga de concretar las tareas necesarias para permitir la distribución a través de la red eléctrica.
Métodos de generación de energía mareomotriz
Los métodos de generación de energía mareomotriz son tres, asociados a distintos tipos de centrales. Por un lado, existen los generadores de corriente de marea que hacen uso de la energía cinética del agua que se mueve, tal como funcionan las turbinas con el viento para producir energía eólica. Conocidos en inglés como tidal stream generators (TSG), se destacan por su impacto ecológico acotado y su bajo costo en comparación a los otros métodos.
Las presas de marea, por otra parte, se valen de la energía potencial que surge con las bajadas y las subidas de marea. En este caso, lo que se hace es trabajar con la retención del agua.
El tercer método es una combinación de los otros dos. Llamada energía mareomotriz dinámica (dynamic tidal power o DTP en inglés), esta técnica requiere la construcción de represas de gran tamaño que aprovechan las diferentes etapas de la marea para la puesta en marcha de las turbinas de corriente.
Ventajas y desventajas
La energía mareomotriz ofrece varias ventajas frente a otras fuentes de energía renovable. Además de no agotarse y de resultar limpia, brinda previsibilidad: es posible anticipar cómo se comportarán las mareas, a diferencia de lo que sucede con el viento, por ejemplo.
De esta manera, calcular la capacidad de generación de las plantas mareomotrices es factible desde antes de su construcción. Por otro lado, las instalaciones de las centrales se destacan por la gran extensión de su vida útil, lo cual contribuye a la posible rentabilidad de estos proyectos más allá de la alta inversión inicial.
Al no provocar emisiones de gases de efecto invernadero, suele considerarse que la energía mareomotriz aporta al desarrollo sostenible ya que no contribuye al cambio climático. Por eso se enmarca su impulso en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y está en sintonía con lo pactado internacionalmente en el Acuerdo de París.
Sin embargo, hay quienes advierten sobre el impacto ambiental de sus instalaciones, que incluso podrían atentar contra la conservación de los ecosistemas marinos. La política energética, pues, debe considerar tanto las ventajas como las desventajas de la energía mareomotriz.
Principales plantas de energía mareomotriz
Entre las principales plantas de energía mareomotriz, se destaca la central del lago Sihwa en Corea del Sur, que es la más grande del planeta. Inaugurada en 2011, se desarrolla a lo largo de 12,5 kilómetros y puede generar más de 250 MW por día.
En cuanto al tamaño, detrás de esta instalación coreana aparece la central de la Rance, que fue la primera inaugurada a nivel mundial. En funcionamiento desde 1966, se encuentra en el noroeste de Francia y genera 240 MW diarios.
Otros tipos de tecnología de energía marina
Cabe resaltar que la energía mareomotriz no es el único tipo de energía marina. Es habitual que se produzca una confusión entre la energía mareomotriz (basada en las mareas) y la energía undimotriz (que aprovecha las olas).
La energía maremotérmica, en tanto, se sustenta en la diferencia de temperatura que se registra en las aguas profundas (frías) y las aguas superficiales (más cálidas). La llamada energía azul, asimismo, surge por la distinta concentración salina entre el agua marina y el agua de río.
Otras variantes son la energía eólica marina fija (los aerogeneradores se instalan en el mar, fijándolos al lecho marino), la energía eólica flotante (los aerogeneradores se ubican en estructuras flotantes) y la energía solar fotovoltaica flotante (los paneles flotan en el agua).