Para reponerse de un malestar o una enfermedad, en ocasiones resulta importante guardar reposo.
Reposo es el acto y la consecuencia de reposar. Es importante conocer que tiene su origen etimológico en el latín, concretamente en el verbo “repausare”, que puede traducirse como “detenerse para hacer un descanso” y que es fruto de la suma de dos partes claramente diferenciadas: el prefijo “re-” y “pausar”, que significa “pausa”.
Este verbo tiene varios usos: puede referirse a la falta de movilidad o actividad, a la interrupción del trabajo o al descanso. Por ejemplo: “El médico me indicó que haga reposo por dos días antes de retomar mis actividades”, “Luego de unas tres horas de reposo, los exploradores retomaron la marcha”, “Para que un jugador pueda ejecutar el tiro libre, el balón debe estar en reposo”.
TemasEl reposo como interrupción de las actividades
Lo habitual es que el reposo se asocie a una pausa en las obligaciones o en las actividades. Si un atleta entrena una hora por día pero, por una lesión, debe suspender sus entrenamientos por tres días, puede decirse que en dichas jornadas hará reposo.
El reposo suele ser una indicación que dan los médicos para que una persona se reponga de una dolencia o una enfermedad. Esto quiere decir que, en los días de reposo, el paciente debe permanecer en su hogar, preferentemente recostado y descansando. El reposo sirve para que el individuo recupere sus fuerzas y no se exponga ante otros trastornos debido a la baja de defensas vinculadas a un malestar. El reposo, en algunos casos, también impide que el sujeto contagie a otro.
Cuando surgen complicaciones en un embarazo, es habitual que a la mujer se le indique reposo.
Una indicación para embarazadas
En el caso de las embarazadas, hay muchas veces que los médicos les establecen un tiempo de reposo. Por regla general, eso suele ser así cuando tienen un periodo de gestación de riesgo que les puede llevar a perder al bebé o cuando se enfrentan a otras complicaciones tales como sufrir un cuadro de estrés o ansiedad.
En esas circunstancias, deben hacer caso al doctor y llevar a cabo reposo. Para poder soportarlo de la mejor manera posible, se hace imprescindible que piensen en todo momento que es por el bien del hijo, que cuenten con el respaldo y el cariño de sus seres queridos, que se lo tomen como un merecido descanso y como la manera de coger fuerzas para cuando llegue el pequeño o que aprovechen para hacer cosas que tenían dejadas de lado y que les gustan (ver películas, escuchar música, disfrutar de un buen libro, ver la televisión, poder dormir todo lo que quieran…).
El reposo en la física
En el ámbito de la física, se define como reposo al estado que adopta la materia cuando un cuerpo carece de movimiento.
Puede tratarse de un reposo relativo (el cuerpo que no se mueve se encuentra sobre otro que sí tiene movimiento) o un reposo absoluto (el cuerpo no se mueve en un espacio que también está estático).
El término en una frase popular
No podemos olvidar que existe una conocida frase que toma como eje central el término que nos ocupa. Se trata de la que dice así: “la mujer es el reposo del guerrero”.
Existen muchas teorías sobre su significado, sin embargo, la más antigua establece que se trata a una referencia a la Edad Media, pues en aquel entonces los guerreros cuando no estaban luchando acudían a burdeles para olvidarse de la contienda y “relajarse” con prostitutas.
