Una bebida es una sustancia que puede beberse. Esta acción (beber) alude a la ingesta de un líquido. El agua, la gaseosa, el vino, el café y la cerveza son algunas de las bebidas más populares.
Por ejemplo: «Voy a ordenar pollo a la parrilla y, como bebida, una copa de vino malbec», «Esta noche daré una fiesta en mi casa: los hombres deben traer la comida y las mujeres, la bebida», «Mi bebida favorita es el jugo de naranja».
Consumo de bebidas
La finalidad más importante de la bebida es saciar la sed. En este sentido, las bebidas adecuadas son el agua o los jugos (zumos) naturales. Sin embargo, las personas suelen elegir las bebidas de acuerdo a su sabor y a cómo estos se combinan con los alimentos que acompañarán. En este marco ganan preponderancia las gaseosas (refrescos), los vinos y las cervezas.
También es habitual que se consuman bebidas como parte de eventos sociales. Beber un cóctel en una discoteca o un club nocturno, brindar con champán en una fiesta de cumpleaños o celebrar el Año Nuevo con sidra son acciones muy comunes.
Contenido alcohólico
Cuando se habla de «la bebida», suele aludirse al conjunto de bebidas alcohólicas. Incluso se emplea el término en solitario para referirse al consumo y al abuso de esta clase específica de bebidas: «Disculpe, pero en este lugar no está permitida la bebida», «Mi abuelo perdió su empleo y su casa por culpa de la bebida», «Preso del dolor, el joven se entregó a la bebida».
Cabe destacar que las bebidas alcohólicas son aquellas que contienen alcohol etílico. Pueden elaborarse a través de un proceso de fermentación (como la cerveza o el vino) o mediante la destilación (el licor, el coñac).
Ejemplo de bebidas
El mojito es una de las bebidas más populares a nivel mundial, y suele consumirse durante la primavera y el verano a modo de entrante. Se estima que su creación tuvo lugar en un restaurante de Cuba llamado La Bodeguita del Medio, en la época en la que estaba vigente la «ley seca» americana. La preparación incluye azúcar moreno, hojas de hierbabuena, trozos de lima, hielo picado, ron y agua mineral con gas.
Otra bebida muy consumida para calmar el calor es el daikiri de plátano, una perfecta combinación de efectos refrescantes y nutritivos. En este caso, los ingredientes necesarios para elaborar la receta son ron blanco, marrasquino (un licor que se prepara a base de la cereza denominada marrasca, con miel, almendras y azúcar), zumo de limón, un plátano, azúcar glass y cubitos de hielo, los cuales debemos mezclar y triturar hasta obtener un resultado homogéneo.
El agua de Valencia es otro de los favoritos y se considera una buena fuente de vitamina C, dado que uno de sus ingredientes principales es el zumo de naranja, el cual se debe mezclar con champán, vodka, ginebra y azúcar. Es importante usar naranjas frescas y exprimirlas justo antes de la preparación. Para obtener los mejores resultados se recomienda servir esta bebida bien fría. La receta se adjudica a Constante Gil, quien la elaboró por primera vez en 1959 en el Café Madrid de Valencia. Aunque hoy en día goce de bastante popularidad, por más de diez años la consumieron solamente los clientes de dicho bar.
La importancia de la hidratación
Cuando llega el calor, es muy importante no olvidarnos de consumir la cantidad adecuada de líquido durante el día. Esto no significa que durante el invierno o el otoño sea correcto evitar las bebidas, pero dado que el cuerpo no elimina tanto líquido, las consecuencias son menos graves.
Si bien muchas personas disfrutan simplemente del agua fría, otras prefieren las bebidas preparadas y en este contexto encontramos decenas de recetas.