Cesar es un término que tiene diferentes usos de acuerdo a su forma de escritura y a su acentuación. Es posible distinguir entre cesar, césar, Cesar o César, todos vocablos que aluden a diferentes cuestiones.
Cuando el vocablo se escribe con minúscula inicial y se acentúa en la letra A (cesar), se trata de un verbo que refiere al acto de interrumpir, finalizar o terminar algo. Por ejemplo: «No voy a cesar hasta ver al asesino de mi hijo en la cárcel», «¿Puedes cesar con ese ruido? Estoy tratando de dormir», «Llueve sin cesar desde hace varias horas».
Cesar una acción, en definitiva, supone frenar su desarrollo. Si una persona está llevando a cabo obras para reformar su casa, puede optar por cesar los trabajos cuando llega el verano. Esto implica que las labores no se realizarán en dicho periodo. Luego, es posible retomarlas. En otros casos, el cese es definitivo: una empresa que se declara en quiebra, despide a sus trabajadores y cierra sus puertas, se ve forzada a cesar sus actividades para siempre.
Lugares denominados Cesar
Cesar, con C mayúscula y acentuación en la A, es el nombre de un departamento colombiano que cuenta con más de un millón de habitantes y cuya capital es Valledupar. Otros municipios de Cesar son Aguachica, Agustín Codazzi, Bosconia y Chimichagua.
El río Cesar, por su parte, surge en la Sierra Nevada de Santa Marta, en Colombia. Tras recorrer unos 280 kilómetros, su desembocadura se produce en la Ciénaga de Zapatosa.
En el municipio portugués de Oliveira de Azeméis, existe una freguesia llamada Cesar. Tiene una superficie de menos de 7 kilómetros cuadrados y una población de poco más de 3.200 habitantes.
Un nombre masculino
César, con mayúscula inicial y acento en la E, es un nombre propio masculino. El dictador romano Cayo Julio César, el escritor peruano César Vallejo y el futbolista y entrenador español César Rodríguez comparten este nombre.
Se establece que ese nombre de varón es de origen latino y que puede traducirse como «de pelo abundante y largo». Hay que indicar que suele manifiestarse que los hombres llamados así son honrados, poseen un gran atractivo y tienen las ideas muy claras.
De la misma manera, se viene a establecer que son leales, cuentan con un enorme sentido del honor y suelen ser románticos. Todo eso sin pasar por alto sus capacidades creativas y sus cualidades innatas como líderes.
Personalidades llamadas César
Además de los personajes indicados, hay otros individuos conocidos que también tienen el nombre de César, como sería el caso de los siguientes:
- César Manrique, un artista canario que diseñó espacios tan importantes como los Jameos del Agua en Lanzarote, el Lago de la Costa Martiánez en el Puerto de la Cruz y el Jardín de Cactus, también en Lanzarote.
- César Vidal, periodista y escritor español autor de obras tales como «La sabiduría del Antiguo Egipto», «Historias curiosas del ocultismo», «El holocausto» y «La esclava de Cleopatra».
- César Milstein, un químico argentino nacionalizado británico que fue el ganador del Premio Nobel de Medicina en 1984. Se le concedió este prestigioso galardón por sus investigaciones sobre los llamados anticuerpos monoclonales. Además obtuvo otros importantes reconocimientos como el Premio Konex de Brillante por el legado que dejó a las ciencias en general y a la medicina en particular.
- César Luis Menotti: Exfutbolista y director técnico argentino, como entrenador se consagró campeón del mundo en 1978, dirigiendo a la selección de su país. Menotti alcanzó un gran reconocimiento por el estilo de juego de sus equipos, siempre privilegiando el ataque.
Un título o distinción
Finalmente, césar (con minúscula inicial y acento en la E) es un título o una distinción que existía en el Imperio romano, creado a partir de la posición de poder que ostentaba Cayo Julio César: «El césar ordenó asesinar a su rival», «En el medio de la discusión, un joven agredió al césar».
Como reconocimiento, pues, césar es una derivación del cognomen (sobrenombre en la Antigua Roma) de Cayo Julio César. En una principio era un nombre familiar aunque a partir de la posición ocupada por el mencionado dictador, cónsul y general se convirtió en una especie de condecoración. En este sentido, césar se transformó en un calificativo imperial desde al año 69.
A partir de entonces, se usó como un título del emperador y además para hacer alusión al sucesor que designaba el propio emperador. Dicho término, a su vez, se considera el origen de otros títulos, como el del zar que se utilizó en Rusia y el káiser alemán.
César en la tetrarquía
El emperador Diocleciano instauró en 293 un sistema de gobierno que se conoció tetrarquía. Mediante este régimen, el Imperio romano fue dividido en dos: el Imperio romano de Occidente y el Imperio romano de Oriente. Cada uno de estos territorios, asimismo, eran regidos por dos césares y dos augustos.
El sistema no se mantuvo demasiado en el tiempo. Cuando el Impero romano de Occidente cayó, la proclamación del título de césar dejó de llevarse a cabo, según explican los historiadores.