El almíbar es el azúcar que se encuentra disuelto en una cierta cantidad de agua y que se lleva al fuego para adquiera una consistencia similar a la del jarabe. Puede decirse, de este modo, que el almíbar es una disolución de azúcar y agua que fue cocida para que se espese.
La expresión persa mey be, que de acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE) puede traducirse como “néctar de membrillo”, llegó al árabe clásico como maybah. Luego, este término pasó al árabe hispánico como almíba. Finalmente, el concepto arribó al castellano como almíbar.
Características del almíbar
Las características del almíbar dependen del tiempo que se dedica a la cocción y de la cantidad de azúcar que se disuelve en el agua. De acuerdo a cómo se combinan estos dos factores, el almíbar puede resultar duro o casi líquido.
Para poder preparar un buen almíbar, hay que tener en cuenta una serie de trucos como estos:
- No hay que emplear agua fría, sino natural (temperatura ambiente).
- El almíbar hay que cocinarlo a fuego suave.
- La cuchara que se utilice para todo el proceso de elaboración del almíbar se recomienda que sea de madera porque no influirá en la temperatura y, además, conservará el sabor de todos los productos.
- Los almíbares que cuentan con menor cantidad de azúcar es fundamental que se conserven en frío.
- Si se considera que al enfriar se va a cristalizar, se puede aplicar un poco de vinagre o zumo de limón.
- Hay quienes en lugar de utilizar azúcar para preparar el almíbar se decantan por la miel.
Sus usos
Los usos del almíbar son múltiples en el terreno de la gastronomía. Puede usarse para la elaboración de caramelos, para la cobertura de tortas, como base de postres y para conservar frutas, por citar algunas posibilidades.
Muchas frutas, de hecho, suelen comercializarse en almíbar. Para obtener este producto, se corta la fruta en rodajas o cubos y se cocina con el almíbar. El proceso hace que el agua de la fruta pase a los azúcares del almíbar. Finalmente, una vez que se enfría la preparación, se coloca en frascos esterilizados para que puedan conservarse por un periodo extendido de tiempo. Los duraznos en almíbar, el zapallo en almíbar (calabaza en almíbar), los higos en almíbar y las castañas en almíbar son algunas de las preparaciones de este tipo de mayor popularidad.
Otras utilizaciones del término almíbar
No podemos pasar por alto la existencia de una peña flamenca de la ciudad de Córdoba (Andalucía – España) que se da en llamar El Almíbar.
En Aranjuez, en tanto, existe un restaurante – gastrobar que también responde al nombre de Almíbar. Se puso en marcha a principios de la década de los años 80 y desde entonces ha conseguido consolidarse y convertirse en un local de referencia. Todo eso gracias a su gran carta de vinos, a unas instalaciones atractivas y, sobre todo, a una lista de recetas de máxima calidad. Entre estas destacan la brandada de bacalao gratinada, los huevos rotos con jamón y papas crujientes y las habitas salteadas con alcachofitas y jamón, entre otros.