Calistenia es un término que procede del vocablo inglés callisthenics. El concepto denomina a un conjunto de ejercicios físicos que permiten ganar fuerza e incrementar la agilidad.
Puede entenderse a la calistenia como un método o un sistema de entrenamiento que se basa en el uso del propio peso del cuerpo. La calistenia trabaja sobre grupos o cadenas musculares y tiene en cuenta la plasticidad y la estética de los movimientos, ya que también apunta a lograr armonía y belleza.
Antes de entrenar
Es importante acudir a un médico antes de iniciarse en la calistenia para la realización de un chequeo y así confirmar que se está apto para el ejercicio físico. Por otra parte, resulta conveniente contar con el acompañamiento de un profesor de gimnasia o entrenador profesional que esté en condiciones de actuar como guía para indicar cómo deben desarrollarse correctamente las rutinas.
El calentamiento previo al entrenamiento, por otra parte, es indispensable para reducir el riesgo de lesiones. Una vez que comenzó la ejercitación, no hay que forzar las posturas ni las articulaciones y se deben respetar los periodos de recuperación.
Por supuesto, quien entrena debe prestar atención a su cuerpo y no minimizar dolencias. Un diagnóstico temprano y un eventual tratamiento pueden evitar que una lesión menor se agrave. Además así es posible sortear padecimientos y trastornos crónicos que, en el largo plazo, impidan la actividad física.
Tipos de calistenia
Existen distintas modalidades o disciplinas que se enmarcan en lo que se conoce como calistenia. La gimnasia deportiva, de hecho, suele ser considerada como un tipo de calistenia.
Al entrenamiento que tiene lugar en calles, parques y otros espacios públicos se lo denomina con la expresión inglesa street workout. Esta forma de calistenia es la más popular y suele apelar al uso de bancos, árboles y diversas estructuras para distintos ejercicios.
Decíamos líneas arriba que la característica distintiva de la calistenia es el uso del peso corporal para la realización de las rutinas. Si se añade un lastre para aumentar el esfuerzo, se puede hablar de calistenia lastrada.
La calistenia cooperativa, en tanto, supone que dos o más individuos colaboran entre sí para la realización de los ejercicios. Muchas veces uno hace el ejercicio y el otro añade resistencia.
Ejercicios más populares
La calistenia incluye ejercicios que son muy conocidos y que también forman parte de otras metodologías de entrenamiento. Los abdominales y las sentadillas, por ejemplo, suelen incluirse en las rutinas más básicas de calistenia.
Cuando ya se dominan estos ejercicios simples, se puede avanzar hacia figuras de mayor complejidad como la plancha y la bandera. También se suman saltos y giros que enriquecen la práctica.
A nivel general, la calistenia busca que el cuerpo alcance una alineación apropiada y que se consiga una buena contracción muscular. Esto ayuda a delinear el contorno y a mejorar la postura.
Es importante tener en cuenta que la calistenia supone una gran cantidad de repeticiones de cada movimiento. El foco se pone en la forma de realización y no tanto en la intensidad del esfuerzo.
Más allá de la calistenia
Como proceso o sistema, la calistenia puede combinar un entrenamiento de fuerza con un entrenamiento de resistencia corporal, entre otros métodos. En su desarrollo es posible que incluya prácticas o técnicas de aeróbic, yoga, pilates y parkour, por ejemplo.
La finalidad es ganar flexibilidad, coordinación, movilidad articular y otras destrezas y capacidades que son necesarias en el deporte pero que también mejoran el bienestar y la salud.
Cabe destacar que la calistenia, que puede llevarse a cabo en espacios al aire libre, en un gimnasio o en cualquier otra zona de entrenamiento, ayuda a prevenir las lesiones deportivas y contribuye a la recuperación muscular. Por supuesto, debe complementarse con ejercicios de enfriamiento y estiramiento, una hidratación adecuada y cualquier otro cuidado que ayude a proteger el cuerpo humano.
No se puede dejar de resaltar que, como ya mencionamos, la calistenia puede practicarse en cualquier sitio. Una habitación es suficiente para realizar una rutina de entrenamiento con series y repeticiones, con lo cual ni siquiera es necesario salir de la casa. Si hay tiempo libro en la oficina, también puede realizarse allí. De todos modos, los beneficios se multiplican al acudir a un parque o una plaza ya que el entorno resulta ideal para relajarse y recrearse.
Por esto mismo, la práctica de calistenia no requiere pagar un gimnasio. Tampoco se necesitan implementos ni accesorios, aunque algunos pueden ser útiles para ciertos ejercicios. Lo que sí es importante es acudir a un profesional de la medicina antes de empezar con la práctica para tener en claro si existen riesgos y para prevenir lesiones. De todos modos, esta asesoría previa es indispensable con cualquier deporte, lo que supone que no se trata de un requisito asociado de forma exclusiva a la calistenia.