Definición de

Heteronormatividad

Homosexualidad

El lesbianismo elude la heteronormatividad.

La heteronormatividad es el sistema social que considera a la heterosexualidad como la orientación sexual normal o adecuada. Esto implica que los demás tipos de relaciones incumplen las normas sociales (es decir, aquellas reglas que deben respetarse para vivir en comunidad).

La normatividad de género alude a aquellas normas sociales que establecen qué es apropiado y qué no para las mujeres y las hombres en una sociedad determinada. Dicha diferenciación define el modo en que las personas pueden disfrutar su libertad y acceder a diversos recursos. La heteronormatividad implica que los heterosexuales gozan de privilegios respecto a quienes tienen otra orientación sexual o una identidad de género que no coincide con el sexo que le asignaron al nacer.

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El género

El género es una construcción que se realiza a partir de los roles que una sociedad otorga a las mujeres y los hombres. Esos roles de género no están determinados por la biología. En este marco, la identidad de género de cada sujeto es el resultado de su propia percepción, pudiendo ser coincidente o no con las características sexuales surgidas de la anatomía.

La sociedad, en este marco, da forma a lo que se entiende por masculinidad y feminidad. Irrumpen, de este modo, estereotipos de género que fijan cómo deben actuar los hombres y las mujeres.

La heteronormatividad se asocia al cisgénero: la coincidencia entre el sexo asignado en el nacimiento y la identidad de género (a diferencia de lo que sucede con alguien transgénero). Como sistema social, se basa en el binarismo de género (únicamente existen dos géneros diferentes y complementarios); por extensión, se considera que las relaciones apropiadas o correctas se dan entre individuos de sexo opuesto.

Puede decirse que la heteronormatividad alinea sexo biológico, orientación sexual y roles, identidad y expresión de género. Esto produce el ya mencionado privilegio cisgénero que atenta contra la diversidad sexual y contribuye a la desigualdad social ya que provoca la marginación o exclusión de gays y queers.

Gays

La heteronormatividad atenta contra la inclusión.

Historia del término heteronormatividad

Se considera que el teórico social y crítico literario norteamericano Michael Warner fue quien acuñó el término heteronormatividad a comienzos de la década de 1990. En el desarrollo de la teoría queer, Warner analizó cómo las disidencias sexuales y de género son forzadas a adaptarse a la heteronormatividad para lograr una aceptación social más amplia. En este contexto consideró que el matrimonio igualitario es un procedimiento que pretende la normalización de la homosexualidad, por ejemplo.

De acuerdo a Warner, la estigmatización asociada al género busca evitar que otros modos de vida se opongan a las estructuras sociales preponderantes. Por eso la heteronormatividad cercena la autonomía.

Antes de este teórico, otros pensadores ya habían analizado la manera en que la sociedad impone normas de género. Adrienne Rich, Gayle Rubin y Monique Wittig son algunas de las filósofas, sociólogas y antropólogas que examinaron estas cuestiones desde el feminismo y otras perspectivas.

Inclusión

Para trascender la heteronormatividad se requiere de educación en diversidad.

Relaciones de poder

Suele entenderse la hetenormatividad como el resultado de relaciones de poder que reglamentan la sexualidad. Los vínculos heterosexuales, considerados como los únicos «naturales» o «normales», son institucionalizados. Por consiguiente, la homosexualidad, la bisexualidad, la pansexualidad y la asexualidad son perseguidas.

Lo no binario no encuentra lugar en la visión heteronormativa. La opresión de género se refleja en homofobia, transfobia, bifobia y otras formas de discriminación.

Cabe destacar que el rol de los medios de comunicación y la cultura popular en la representación de los géneros es muy importante. Los discursos heteronormativos son los dominantes, afectando la vida cotidiana LGBT+.

Ejemplos de heteronormatividad

Un ejemplo de hetenormatividad es la asignación de los colores de la ropa infantil según el género. Lo convencional es que los niños sean vestidos de celeste o azul, mientras que las niñas se visten de rosa. Si un padre viste a su bebé varón de rosado, generará un extrañamiento ya que dicha vestimenta no forma parte de la heteronormatividad.

Algo similar ocurre con el largo del cabello de los chicos. Se acepta que los varones deben llevar pelo corto, a diferencia de las chicas con su pelo largo. Una niña de 10 años con cabello corto puede llamar la atención debido a la heteronormatividad.

Siguiendo con la etapa de la niñez, la heteronormatividad suele aflorar en mecanismos de crianza. Un padre que le dice a su hijo que los hombres no lloran o que le pide que no sea «marica» ante una situación que le genera temor está actuando de acuerdo a la heteronormatividad.

Una mujer que practica boxeo y un hombre que tiene como afición la realización de manualidades, en tanto, escapan de la heteronormatividad. Esto se debe a que no asumen los roles que la sociedad asigna a cada género.

Las publicidades muchas veces ofrecen ejemplos de heteronormatividad. Los anuncios destinados a la venta de implementos y accesorios de cocina, por mencionar un caso, suelen estar dirigidos a mujeres, asumiendo que ellas son las encargadas de preparar la comida. De igual modo, si se desea comercializar algún producto o servicio vinculado al fútbol, se apunta generalmente al público masculino.

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Cómo citar este artículo Julián Pérez PortoPublicado por Julián Pérez Porto, el 22 de octubre de 2024. Heteronormatividad - Qué es, definición, historia y ejemplos. Disponible en https://definicion.de/heteronormatividad/
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