El proceso de fabricación que en la industria manufacturera permite transforman materias primas en un producto listo para comercializar se inicia con un diseño y la especificación de materiales que se utilizarán.
La industria manufacturera es un sector productivo dedicado a transformar materias primas o artículos semielaborados en productos nuevos que están en condiciones de ser comercializados.
Cabe destacar que, en un principio, se asoció al concepto de manufactura con la idea de artesanal, aunque después de la Revolución Industrial la noción trascendió el significado de labor manual para englobar a procesos desarrollados a gran escala para elaborar bienes a partir de la transformación de un determinado elemento. En ese nuevo panorama, la habilidad manual está reemplazada o complementada con maquinaria y robotización a fin de maximizar eficiencia, calidad y productividad.
Por sus particularidades y su relevancia tanto para el desarrollo social y económico, la industria manufacturera se precisa en cada nación y debe, por lo tanto, ser adecuadamente valorada, promovida y defendida. Cada país tendría que tener una política industrial sólida y dar facilidades, instrumentos, estímulos y oportunidades para lograr que cada vez más eslabones de la industria se consoliden y consigan la seguridad y las condiciones suficientes para ampliar horizontes, multiplicar las fuentes de empleo y estar a tono con las últimas tendencias en materia de diseño, logística, sistemas de gestión, etc.
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ResumenClases de industria manufacturera
Hay varias clases de industria manufacturera fácilmente reconocibles. Según qué lugar ocupen en la cadena de producción es posible catalogarlas como tradicionales (ámbito en el cual la materia prima es convertida en un producto listo para salir a la venta y llegar al consumidor final), intermedias (encargadas de producir productos semielaborados destinados al abastecimiento de otras industrias) o mecánicas (generadoras de máquinas y recursos útiles para múltiples procesos industriales). También merecen espacio y reconocimiento las industrias residuales que se valen de residuos y sobrantes para trabajar en función de ellos concibiéndolos como materias primas.
Tomando en consideración su modelo productivo, en cambio, adquieren visibilidad las categorías de industrias manufactureras de producción continua (en las cuales no se corta nunca la actividad productiva), industrias de producción repetitiva (caracterizadas por aplicar el sistema de manufactura continua en casos específicos) y de industrias manufactureras de producción por lotes (donde se trabaja en función de una cantidad mínima de elaboración para no perder rentabilidad).
Tecnología al servicio de la actividad industrial
A medida que pasa el tiempo crece y se diversifica el abanico de opciones que pone a la tecnología al servicio de la actividad industrial.
El proceso de producción se torna más ágil, eficaz y rentable cuando el conocimiento y el esfuerzo humano se potencia con equipamientos de última generación. Para ciertas labores (como las centradas en la línea de ensamblaje o la fase de etiquetado), la robotización es realmente un avance magnífico.
La llamada línea de ensamblaje contempla una labor secuenciada que se divide en estaciones de trabajo en donde se va armando una pieza hasta llegar a ensamblar todas las partes del producto en cuestión.
Adoptando el modelo y las características que definen a la llamada industria 4.0, asimismo, una empresa o emprendimiento prospera a nivel productivo, consigue aprovechar sus recursos de forma más eficiente y consigue herramientas beneficiosas para planificar y tomar decisiones en tiempo real. Sumar ciberseguridad, inteligencia artificial, impresiones en tecnología 3D e Internet de las cosas (IoT) es esencial para enmarcarse en esa revolucionaria fuerza transformadora.
La técnica del mantenimiento predictivo y los sistemas de manufactura flexible son otras opciones que benefician a la dinámica propia del sector industrial.
Variedades de industria manufacturera
Vale la pena conocer o recordar cuáles son las principales variedades de la industria manufacturera con el objetivo de estar al tanto de todas las actividades que se engloban dentro de este ámbito perteneciente al sector económico secundario.
Esta enumeración bien puede iniciarse aludiendo a la industria textil, orientada a producir telas e hilados a partir de elementos como lino, lana y algodón. De querer establecer un ranking de áreas productivas con mayor automatización, en tanto, sin dudas ganará protagonismo la industria automotriz.
En beneficio de la población, por otra parte, es vital la inversión, la innovación y la responsabilidad en la industria farmacéutica, campo donde se sigue un modelo de Buenas Prácticas de Manufactura trazado para fabricaciones seguras y eficaces de medicamentos y otros productos farmacéuticos.
Normativas o pautas similares rigen en la industria de alimentos y bebidas con el objetivo de maximizar los cuidados en la producción, industrialización, almacenamiento, transporte y comercialización de mercadería destinada al consumo por parte de distintas especies de animales (incluyendo a los seres humanos, obviamente).
La industria química, al igual que la industria aeroespacial, son otras ramas que nutren al rubro de las industrias manufactureras.
La seguridad industrial es fundamental para minimizar riesgos de accidentes en el trabajo y proteger al personal de eventuales peligros al desarrollar una tarea o al manipular determinadas sustancias.
Metodologías y herramientas para la gestión industrial
Conocer qué metodologías y herramientas existen para la gestión industrial favorece tanto la organización como la rentabilidad de compañías y su apuesta por un crecimiento ordenado e innovador.
Hay quienes, por ejemplo, recomiendan adoptar el sistema Lean Production (conocido asimismo como Lean Manufacturing) que invita a dejar de lado todo recurso que no sea imprescindible a fin de ganar calidad, tiempo y flexibilidad evitando el despilfarro.
A disposición de las fábricas, por otro lado, está la metodología Toyota o Just-in-time («Justo a tiempo», en español). Está pensada para gastar lo menos posible en realizar inventarios, almacenar elementos y trasladarlos hasta el sector de producción.
Los negocios pueden resultar favorecidos, asimismo, de la mano del método Six Sigma que da pautas y estrategias para que las fallas o los defectos de un servicio o producto al momento de entregarlo a los clientes sean nulos o mínimos.
Llevar adelante un proceso de mejora continua, ocuparse seriamente de la gestión de calidad, no perder de vista la importancia de capacitación y desarrollo y tener una buena gestión de recursos humanos también enaltece al ejercicio industrial.
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